Secciones

  • Portada
  • Actualidad
  • Opinión
  • Actualidad general
  • Deportes
  • Clasificados
  • Cartelera y Tv

(viene de la página anterior)

E-mail Compartir

-¿Se investiga la posibilidad que se haya registrado un auxilio al suicidio (ayuda para que se quite la vida)?

-No se descarta nada. La figura legal de auxilio al suicidio exige varios elementos que en este caso al parecer no concurrirían, pero ello es algo que se tendrá que definir una vez que se tengan todos los antecedentes de la investigación reunidos.

-Fiscal, ¿qué le diría a la familia y a la comunidad?

-Lo que puedo comentar a la comunidad, porque es un tema que ha impactado en Pichicolo, Hualaihué y Río Puelo, es que nosotros como Fiscalía, al igual que en todos los casos que afecta a una mujer -que terminó en forma trágica con la muerte de esta joven que iba a ser madre- lo investigaremos con todos los elementos que nos obliga la legislación internacional, en orden a la mirada de género que hay que dar a estas indagatorias. También vamos a ejercer la acción penal con la máxima rigurosidad que nos permite nuestro ordenamiento jurídico.

Embarazada

María Guillermina Compay, tía de la víctima y hermana del padre de Deysi, está convencida de que su sobrina se suicidó por el maltrato del cual fue víctima. Según María, lo vivido por la joven fue una situación muy compleja y triste: "Nunca pensamos que iba a pasar algo así". relató.

"Ella venía con un problema psicológico desde que falleció su papá. En ese lapso conoció a esta persona, quien la maltrataba. Ella me contó que cuando estaba embarazada de dos meses fue golpeada. Le dije que saliera de allí que no siguiera esperando. Él tenía una orden de alejamiento, pero él le empezó a decir que vuelvan, que nadie la iba a querer porque estaba embarazada", agregó.

Añadió que "ella llegó en una oportunidad agredida al Cesfam golpeada en el abdomen. Le reventó la boca y no sé qué otras cosas más le habrá hecho, ella no contaba tantos detalles", afirmó.

Para María todos estos malos momentos vividos por su sobrina terminaron en el suicidio. "Esta persona le decía que nadie más la iba a querer, pensamos que ella se quitó la vida y no aguantó más".

Insistió que "ella nunca nos hizo saber nada -que se iba a quitar la vida- y sólo nos dijo que era golpeada por él".

María Guillermina Compay explicó que la comunidad les ha entregado apoyo, "pero él ha tenido otras ex parejas que han sido golpeadas y por lo cual estamos pidiendo un castigo para que este tipo no siga maltratando a más mujeres. Mi sobrina se fue a vivir con esta persona a Pichicolo el 20 de julio", agregó.

Deysi, tras ser golpeada en una de las ocasiones, logró enviar un mensaje de voz por WhatsApp a uno de sus familiares.

En una grabación no superior a los 30 segundos, a la cual El Llanquihue tuvo acceso, la joven señaló: "Cachai que no puedo escribir porque ese otro ayer me pegó. Me dio tres palmazos y yo lo denuncié. Estuve casi toda la noche en la Comisaría de Hornopirén. Me da miedo si viene".

Apoyo

Frente a este caso, la seremi de la Mujer y Equidad de Género, Viviana Sanhueza, lamentó la decisión de Daisy de terminar con su vida. "El llamado que hacemos es que cualquier mujer que es víctima de violencia pida apoyo y ayuda a las instituciones que corresponden, para evitar desenlaces como estos".

La secretaria regional recordó que el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, a través de Sernameg, entrega apoyo psicosocial y jurídico de manera gratuita y con perspectiva de género, a todas las mujeres que vivieron algún hecho de violencia, ya sea física, psicológica, sexual o económica.

La autoridad regional informó que actualmente la familia de Daisy está recibiendo asesoría jurídica de parte de un abogado especializado de Sernameg, quien los representa en tribunales, y que es tarea de toda la sociedad erradicar la violencia en contra de la mujer.

"Es responsabilidad de cada uno de nosotros el avanzar en un cambio cultural para construir a un Chile donde no se tolere ningún tipo de agresión, abuso o discriminación en contra de las mujeres".

"Investigaremos con todos los elementos que nos obliga la legislación internacional en orden a la mirada de género"

Carmen Gloria Wittwer, Fiscal regional

"Él tenía una orden de alejamiento, pero le empezó a decir que vuelvan, que nadie la iba a querer porque estaba embarazada"

María Guillermina Compay

Tía de Deysi

20 años tenía Deysi, quien dejó un hijo de dos años y una serie de dudas respecto a los motivos que tuvo para quitarse la vida.

15 semanas de embarazo registraba la joven que fue víctima de diversos hechos de violencia intrafamiliar antes de suicidarse.

Dos proyectos buscan transformar en delito la inducción al suicidio

CONGRESO. Uno de ellos se vincula al caso de Martín Pradenas, imputado de violar a una joven que se quitó la vida.
E-mail Compartir

En mayo de 2017, nueve diputados de todos los colores políticos ingresaron un proyecto de ley que buscaba tipificar en la Ley de Violencia Intrafamiliar (VIF) -vigente desde 2005- la figura de "inducción al suicidio".

El texto legislativo tuvo como inspiración el caso de la joven penquista Antonia Garros (23 años), quien se suicidó al lanzarse desde un balcón de un edificio en Chiguayante, en el contexto de violencia en el pololeo.

El hecho ocurrió el 7 de febrero de 2017 y generó gran impacto en la opinión pública. Más adelante, en 2019, el ex pololo de la joven fue declarado culpable por un episodio de VIF ocurrido dos meses antes del suicidio.

La idea de los diputados tiene su correlato en experiencias internacionales, tales como las lagislaciones de España, Reino Unido, Brasil, Colombia, México y Argentina.

"Cuando producto de maltrato habitual se induzca al suicidio, aprovechándose de cualquier situación de riesgo o de vulnerabilidad física o síquica en que se encontrare la víctima producto de dicho maltrato, se aplicará la pena de presidio menor en su grado máximo (tres años y un día a 5 años) si se efectúa la muerte", sostiene como propuesta de artículo el proyecto de ley que "duerme" en el Congreso y se mantiene en primer trámite constitucional sin urgencia.

Dentro del texto de este proyecto de ley dan cuenta que, de acuerdo a las cifras de ONU Mujeres, el 35% de las mujeres en el mundo ha sufrido violencia física o sexual en algún momento de su vida. En Chile, la Encuesta Nacional de Victimización por Violencia Intrafamiliar y Delitos Sexuales, señaló que el 31,9% de las mujeres ha sido víctima de violencia perpetrada por sus familiares, su pareja o ex pareja.

Caso antonia barra

Otra historia que comparte el desenlace de Deysi Compay es lo ocurrido recientemente con Antonia Barra, quien denunció a su entorno -antes de suicidarse en octubre de 2019- haber sido víctima de violación. Martín Pradenas, el imputado en este caso, está formalizado y en prisión preventiva, por orden de la Corte de Apelaciones de Temuco mientras se realiza la investigación.

La historia de esta joven, que generó revuelo a nivel nacional, también impulsó una iniciativa legislativa, donde la familia de Barra y varios congresistas proponen incorporar a la ley chilena un ilícito alusivo a un suicido femicida, así como también el que se decrete la prisión preventiva inmediata a aquellos imputados por delitos sexuales.

21 años tenía Antonia Barra, quien se suicidó en Temuco tras acusar a su entorno cercano haber sido violada por Martín Pradenas.

2017 se remonta el caso de Antonia Garros, quien se quitó la vida en medio de hechos de violencia cometidos por su pololo.