Remodelación de calle Antonio Varas
La principal arteria comercial de Puerto Montt sufrirá de una intervención mayor dentro de los próximos meses. La empresa responsable de las obras tendrá que mantener un diálogo constante con los vecinos y comerciantes del sector.
Con la adjudicación de las obras de remodelación de la calle Antonio Varas a la empresa Cosal, la semana pasada, se ha dado un paso relevante en la concreción de un proyecto largamente acariciado por los puertomontinos, llamado a cambiarle el rostro a la principal arteria comercial y dignificar, por lo demás, a los usuarios de un espacio público que con los años ha venido sufriendo un pronunciado proceso de deterioro. El proyecto, que transformará radicalmente el aspecto de la calle en el tramo comprendido entre Salvador Allende y Chillán, demandará una inversión de poco más de 8 mil millones de pesos, con cargo al Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), y acarreará naturales complicaciones a peatones y automovilistas por trabajos que se extenderán por más de dos años (780 días corridos desde que se haga entrega oficial de la vía a la empresa que ganó la licitación).
La intervención que experimentará la calle Antonio Varas supondrá un trabajo vial de marca mayor para la ciudad que, además, prácticamente correrá en paralelo con otra iniciativa pronto a iniciarse: la construcción del Parque Costanera que se verificará a pocos metros de la arteria comercial. Dada la magnitud de las obras y la cercanía de ambas, no hay duda que las faenas, con interrupciones del tránsito y velocidad disminuida, tensionarán la vida diaria de los puertomontinos que vivan, laboren o circulen por el sector. Por ello es que resulta tan relevante que la programación de la intervención sea compartida con la comunidad y que la propia empresa, en una práctica que ya se ha seguido en otras ciudades para iniciativas de esta magnitud, se reúna periódicamente con los vecinos para explicar los eventuales retrasos y escuchar las sugerencias y reclamos.
Quienes sin duda se llevarán el peso de las remodelaciones serán los comerciantes del sector. Enfrentados al estallido social primero, a la pandemia en el presente y a la intervención vial en el futuro, necesitarán sin duda de una atención especial de parte de las autoridades para que puedan sobrellevar de la mejor forma tantos meses de inactividad e inestabilidad.