Para Puerto Varas, la Región de Los Lagos, Chile y el mundo, el reciente Foro APEC, por estos confines, donde se congregaron por tres semanas las 21 economías más importantes del globo, fue un acontecimiento único, donde se pudo ser protagonista de los análisis, definiciones y acuerdos más importantes, en torno al presente y futuro del planeta. Donde las claves están en una productividad internacional de calidad y sustentable; en un crecimiento y desarrollo integral y ecológico; en el libre comercio y en el apoyo al sistema multilateral comercial; en la integración económica regional y reforma a la Organización Mundial de Comercio.
Igualmente, fueron temáticas relevantes las referidas a la seguridad alimentaria, en cuanto a su llegada a las comunidades sin excepciones, y el impacto del envejecimiento en las sociedades, buscando que sea activo y saludable. Hubo, asimismo, una Visión Post 2020 en Apec, donde los expertos llegaron a un consenso, proponiendo una visión de futuro para el Foro, en cuanto a digitalización, tecnologías disruptivas, brecha digital, comercio e inversión, fundamentos económicos y de mercado, inclusión y participación, sostenibilidad, alimento y energía.
Para Chile, este gran foro global en Puerto Varas, concretamente, significó logros relevantes como el establecimiento de una hoja de ruta para la pesca ilegal y los desechos marinos, además de la aprobación de los términos de referencia del nuevo grupo digital de Apec, enfocado a tópicos digitales y de internet. Así como, también, nuestro país lideró el imperativo de dar un impulso final a la liberalización de los servicios en la región del Asia-Pacífico.
Sin duda, que para Puerto Varas y la zona, la experiencia fue extraordinariamente valiosa. Confirmaron sus capacidades organizativas de súper eventos; su excelencia turística en el servicio y la atención del forastero; su vocación de proyectarse aspirando siempre llegar más alto; su fortaleza patrimonial y cultural; su ingenio creativo y conciencia hospitalaria… Hacer las cosas bien. Cumplir con excelencia. Eso es ya convicción puertovarina.