Frente a frente se verán las caras esta noche, el pívot de la Academia, Jorge Valencia, y el poste del CDSC Puerto Varas, Héctor Gómez. Dos de las principales figuras de los cuadros locales que protagonizarán el primero de los partidos de la llave semifinal de la Liga Saesa, fijado para las 21 horas en el Gimnasio Municipal Mario Marchant de esta ciudad.

Y es que el clásico de la provincia tendrá un gusto especial: será la repetición de la final disputada en el 2018 y son rivales que se conocen al detalle y prometen un duelo de alto calibre en esta serie.

Por el lado de los dueños de casa, el "Flaco" Valencia, quien ha vestido ambas camisetas, afirmó que a pesar de la lamentable pérdida de Diego Osses por una severa lesión, el equipo lo dará todo en esta llave. "Se recuperó el 'Torito' Garrido y Marquis Johnson, así que como grupo estamos bien y sabiendo que somos los actuales campeones de la Liga y fuimos de la fase regular, así que tenemos todo a nuestro favor para quedarnos con este torneo y lograr la Copa", explicó.

Sobre el rival, Valencia apuntó que el duelo ante Puerto Varas le da un "plus" a esta semifinales, porque es un clásico oponente y por ello será un partido más interesante y atractivo para la gente, para que la gente nos acompañe en esta fase decisiva y llegar a las finales".

En la otra vereda, Tito Gómez indicó que ambos son dos buenos quintetos que tienen conocimientos uno del otro. "Puerto Montt tiene la localía y nosotros queremos ir a robarle uno de los partidos de visita. Estos playoffs han sido bien disputados por todos los clubes, creo que para nadie ha sido fácil, a excepción del CEB que se enfrentó a Osorno; ellos se presentan como favoritos para ganar la serie, pero Puerto Varas tratará de luchar hasta el final y por qué no, pensar en una hipotética decisión con algunos de los equipos de Valdivia", relató el puertovarino.

En cuanto a su quinteto , indicó que en la interna existe mucha confianza y "en mi caso recuperándome de algunos problemas físicos que he presentado y de otros compañeros con molestias, pero vamos a llegar a con la mejor disposición para lograr al menos un triunfo en el municipal y sacarnos un poco la espina de la final pasada", enfatizó.

Javier Andrade Cárdenas

En una lección de coraje y amor por su país, el puertomontino Eber Sanhueza logró el tercer puesto en la especialidad de Doble Par Cortos Peso Ligero masculino en la final de los Juegos Panamericanos, junto a su compañero, el penquista César Abaroa.

La dupla chilena protagonizó una espectacular arremetida para conquistar la medalla de bronce, en una jornada de jueves en que la disciplina sumó cuatro medallas, incluyendo una de oro obtenida por Christopher Kalleg e Ignacio Abraham en la prueba de dos remos largos masculino.

Los nacionales cronometraron un tiempo de 6.28.65 minutos para cubrir la distancia de 2000 metros de la laguna Albufera, ubicada al norte de Lima.

La levantada

Desde Lima, el integrante del club Estrella Blanca conversó con El Llanquihue y comentó que esta presea de bronce equivale a un oro, por como se dio la carrera, "ya que pudimos superar a Cuba en los últimos metros, lo que nos pone felices por lo conseguido".

Sanhueza aprovechó la oportunidad de agradecer a toda la gente que ha estado detrás de estos logros para el remo nacional. "A mis entrenadores de la selección, a Bienvenido Front y todos los que alguna vez han confiado en nuestro trabajo y han puesto su confianza en mí, como también a mi familia que ha estado en todas y, sobre todo, a mi compañero de bote, César Abaroa, debido a que a pesar que no ha sido una temporada tan buena como las anteriores, logramos revertir y terminar con un bronce en estos Juegos Panamericanos", afirmó.

Sobre esa arremetida en los metros finales, el porteño afirmó que fue una levantada espectacular: "Entramos cuartos a los últimos 500 metros, a dos segundos de la pareja cubana y comenzamos a acercarnos. Lo único que se te viene a la mente son los recuerdos de los esfuerzos desplegados para llegar a esa posición destacada y a todos los que te han ayudado a estar en ese nivel. Ha sido un gran cierre de ciclo con esta medalla".

Con respecto a lo que se viene, agregó que el objetivo será descansar un poco, enfocarse más en los estudios y después volver recargado a los Preolímpicos a realizarse en abril. "La gran meta ahora es llegar a Tokio en el Doble", comentó.

Por su parte, el presidente del Club de Remo Estrella Blanca, Andrés Kappes, no ocultó su orgullo por el presente del deportista nacido en el club puertomontino. "Un joven formado bajo el alero del club y que no ha dejado de pertenecer a él. Creo que es la primera medalla panamericana para uno de nuestros deportistas y estamos agradecidos de todo lo que ha realizado en beneficio de esta institución, especialmente entre los más jóvenes y es un ejemplo para los que están formándose en esta disciplina y que ha inculcado sólo valores positivos a ellos; lo mismo que su compañero César Abaroa", afirmó.