Revuelo causó la exclusión de Historia de los ramos obligatorios para 3° y 4° medio que habrán de cursarse a partir del próximo año. Detrás de la medida nada parece suponer un desconocimiento o un sesgo ideológico. Tampoco mala fe de parte de las autoridades al justificar la decisión. Es cierto que todo cambio curricular es difícil y complejo, implica escoger entre esto o aquello. Es verdad también que todo profesor dirá siempre que su disciplina es más importante.

No obstante, dejar Historia solo como un ramo optativo provoca algún reparo por su elección y oportunidad, que va en un total contrasentido con los tiempos que corren. Veamos sucintamente porqué. Hablar de nuestro pasado es un acto propio y natural de la condición humana donde la memoria, la temporalidad y el relato son sus piezas instrumentales. Surge de la necesidad de revelar a otros quiénes somos y de cómo nos vemos como sociedad en el tiempo. La Historia es la más humana de las disciplinas. Como dijo el rector Carlos Peña en un medio; "quizás no sea del todo correcto elegir perder Historia porque, atendida la índole de la condición humana; ello podría equivaler casi a perderse a sí mismo." Pero la Historia también es presente y futuro. Frente a los tiempos líquidos y vertiginosos que vivimos, llenos de perplejidad y reinvención permanente, la Historia parece ser la única capaz de darnos luces de lo que sucede, de cómo llegamos hasta acá y del futuro que avizoramos. Por otro lado, no existen hoy personas más críticas de nuestro pasado que nuestros jóvenes, que más movilizados lo hacen también con crecientes dosis de anomia, irritación y desafección. Si esperamos tener jóvenes más adeptos a la Democracia y de lo que significa ser ciudadano, toda educación ciudadana debe secundarse con una mayor reflexión histórica que les enseñe a pensar críticamente sobre el pasado, y de lo que ocurre cuando la democracia y sus instituciones se descuidan o se pierden. A su vez, hay mucha gente comprando y leyendo libros de Historia con récord de ventas. Todo ello resulta contradictorio, mientras el interés por la Historia aumenta en audiencia, su lugar se acorta en el curriculum escolar.

Aldo Fredes Gallardo, Director Ped. Media en Historia y Geografía. Universidad San Sebastián, Sede De la Patagonia.

Levantarse de las cenizas de un incendio destructivo, como aquel del 3 de mayo que asoló a varias casas comerciales en calles Varas y Diego Portales, en pleno centro de Puerto Montt, ha de ser una titánica tarea, que demanda mucho espíritu valeroso, perseverante y de superación de los esforzados comerciantes seriamente afectados por el inesperado siniestro. Los cuales, prácticamente, han debido empezar de nuevo en el rubro, rescatando lo que han podido y reconstruyendo lo que el fuego, en pocos minutos, redujo a escombros, pero no así la férrea voluntad indómita de resurgir de estos pujantes hombres y mujeres del comercio local.

En ese contexto de incansable y decidido batallar por ponerse de pie de nuevo, con renovadas iniciativas, buscando alternativas y mucho trabajo, un grupo de emprendedoras comerciantes damnificadas del incendio, organizaron un novedoso espectáculo musical recreativo para el próximo sábado 29 en la Costanera, en las inmediaciones del Campo de Marte. Al que han denominado la "Gran Fiesta de la Amistad" y tiene por objetivo recaudar fondos para reconstruir sus negocios y así reiniciar las actividades que permitan el sustento familiar. Aunque, al mismo tiempo, hay otra finalidad que consiste en aportar una oportunidad de convivencia fraterna a los porteños y de grata recreación junto a la Banda Municipal y de reconocidos conjuntos folclóricos, en un intento también (aunque falta bastante) de ir ya haciendo ambiente dieciochero entre los porteños, como lo han recalcado los organizadores. Todo esto, más el apoyo estratégico de carros "food track" provistos de productos típicos de la zona, que recorrerán el festivo sector.

Las emprendedoras comerciantes damnificadas del incendio, llaman a la solidaridad con ellas en esta particular ocasión. Acudiendo en buena cantidad, el sábado 29 a la Costanera, al singular programa artístico que se les ha preparado y donde el éxito del evento dependerá de la participación de la gente y su buena voluntad de solidaria colaboración con los damnificados de la tragedia.