De acuerdo a Mauricio Maya, director regional del Instituto Nacional de Derechos Humanos, se han abordado diversas materias en los cuatro años. Entre ellas, el tema carcelario, "donde se debe cumplir la garantía estatal de protección de integridad de las personas privadas de libertad. La mayor cantidad de querellas que hemos deducido ha sido por violenta policial, pero también hemos incursionado en temas medioambientales", expresó.
La necesidad de ampliar la función del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) en toda la Región de Los Lagos, es uno de los puntos que marcaron el cuarto aniversario de este organismo en Puerto Montt y creado en el 2010 en Santiago.
Fue la directora nacional del INDH, Consuelo Contreras, quien se refirió a la necesidad de ampliar la capacidad del instituto a toda la región, lo que motivó además que el director regional, Mauricio Maya, realizara una cuenta pública de lo que ha sido la institución a lo largo del tiempo.
"Hacemos un buen balance en términos de la actuación del instituto en la región, y la idea es ampliar el equipo y extendernos a zonas donde es más difícil de llegar, por los problemas de conectividad que tiene la región. Es algo que tenemos que ver a corto y mediano plazo", argumentó Consuelo Contreras.
De acuerdo a la autoridad, el instituto ha logrado visibilizar y atender situaciones que son de grave vulneración a los derechos humanos y fundamentalmente materias que tienen que ver con violencia policial. "El instituto se hizo parte del primer caso de desaparición forzada que ocurrió en el país tras el retorno a la democracia. Desde la dirección nacional hay una buena evaluación de la instalación del INDH en la región", aseveró.
La directora nacional del Instituto señaló que la gran ventaja que tiene en la actualidad el caso Huenante, es que pasó a la justicia civil, lo que se convierte en un avance sustantivo.
Indicó que Chile ratificó la convención sobre desapariciones forzadas y en el mes pasado tuvo el primer examen ante el Comité de Naciones Unidas sobre estos hechos.
Manifestó que Chile tuvo que dar cuenta de los avances en materia de búsqueda tanto de las desapariciones ocurridas entre 1973 y 1990, como de los cuatro casos de desaparición forzada que existen en democracia en distintos puntos del país.
"Una de las cosas que observó el comité con mucha fuerza, fue la necesidad de contar con un plan de búsqueda, no sólo para las víctimas del período del 73' al 90', sino que también un plan de búsqueda para los cuatro casos que hay donde uno sólo está con condena", afirmó.
La directora del instituto agregó que es importante generar conciencia en la población de la gravedad que tienen las desapariciones forzadas. "El Estado no ha definido ni establecido planes de búsqueda para los detenidos desaparecidos", aseguró.
Una de las diligencias que estaba pendiente y que esta instruida por el fiscal Jorge Raddatz, de Puerto Varas, dice relación con la ubicación del propietario del terreno donde estaba emplazada la enorme plantación de marihuana en Fresia.
Ello ha motivado una serie de movimientos del OS 7 de Carabineros, no sólo en las cercanías de la localidad de Tegualda, sino que en otros puntos de la comuna de Fresia, porque el lugar habría estado arrendado e incluso subarrendado.
Se trata de elementos que tienen que corroborar los peritos del OS 7 a cargo de la indagatoria, que por ahora no ha arrojado detenidos que tengan relación con las siete mil 66 plantas de marihuana.
De acuerdo al jefe de la Décima Zona de Carabineros, general Patricio Yáñez, las diligencias obedecen a un plan de activación especial, que se está desarrollando en la zona sur del país tendientes a detectar nuevas formas de tráfico. "La incorporación de invernadero de grandes dimensiones era una de las materias que se estaba trabajando en el sector, se activaron redes comunitarias de información que permitieron establecer los niveles de tráfico o consumo que estaban existiendo; si bien no había un consumo tan fuerte en Fresia, se tenía conocimiento que había una distribución, y ante esta situación se activa esa búsqueda de información", apuntó.
Confirmó que en el lugar ya existían tres invernaderos, que estaban en proceso de almácigo y de cosecha, y un cuarto que estaba siendo construido de menor tamaño.
No alcanzaron a huir con el botín que habían obtenido tras varios robos cometidos en diferentes tiendas comerciales en Los Muermos. Fue un funcionario de civil de Carabineros, que las observó mientras se movilizaban en un bus.
Las jóvenes son dos conocidas mecheras que se mueven en la zona y gran parte de la región, ambas con antecedentes por delitos similares.
Fueron atrapadas tras diversas denuncias, producto de delitos que cometieron fuera de Puerto Montt.
Fueron reconocidas por los trabajadores de las tiendas en Los Muermos.
La subteniente Valentina Molina, jefa de la Sección de Investigación Policial (SIP) de la Quinta Comisaría de Carabineros, explicó que fueron tres las denuncias de hurtos y robos que afectaron a similar cantidad de tiendas, en dicha comuna, en los cuales estarían involucradas.
Tras el procedimiento, explicó la oficial, se recuperó gran cantidad de prendas de vestir y elementos tecnológicos. Se habría tratado de la totalidad de los artículos sustraídos en estos delitos. "Un funcionario de la SIP se encontraba en servicio nocturno y se trasladaba hasta Puerto Montt (desde Los Muermos). En el bus en que se movilizaba reconoció a las dos personas, como delincuentes habituales, que mantenían antecedentes y en otras ocasiones habían sido fiscalizadas en controles preventivos. Se realizó una nueva fiscalización, manteniendo presente las denuncias realizadas en Los Muermos, por lo que se procedió a la detención, quedando ambas a disposición del Tribunal de Garantía", comentó la subteniente Molina.