Muñoz acusa "obsesión del gobierno" con Bachelet
POLÉMICA TUITERA. Ex canciller explica la historia de la caricatura de la ministra y aborda su opción presidencial.
Heraldo Muñoz llegó a Puerto Varas para participar de una reunión sostenida por la directiva mundial Fundación Pew, que se dedica al desarrollo sustentable y la protección de los océanos. Sin embargo, durante las últimas horas el ex canciller ha marcado la agenda noticiosa, luego que publicara en su cuenta Twitter @HeraldoMunoz una caricatura de la ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, por lo que ha recibido una serie de críticas.
Pero el presidente del Partido por la Democracia se defiende y -a la vez- acusa una obsesión del gobierno por la ex Presidenta Michelle Bachelet, al pedirle que hable de todos los temas, aún cuando no pueda referirse a ellos. De ahí el mensaje de la caricatura, de que la ministra le solicita que se refiera a las altas temperaturas de estos días.
Esta polémica no fue lo único que abordó Muñoz. También lo fue su candidatura presidencial. "Quizás sea una posibilidad, pero hoy día soy el presidente del Partido por la Democracia. Si mi nombre genera en el partido y en la ciudadanía apoyo, lo consideraré; pero hoy día no está sobre la mesa".
-¿Cómo toma las críticas que ha recibido por la caricatura de la ministra vocera de Gobierno Cecilia Pérez que publicó en Twitter?
-La cuestión de fondo es la obsesión del Gobierno con la ex Presidenta Michelle Bachelet, a quien se le debe tener el debido respeto. Y el Gobierno ha estado reiteradamente llamándola a que haga declaraciones, pidiéndole cuentas y desconociendo la realidad de un organismo internacional como Naciones Unidas, que en el caso de la ex Presidenta, ella no puede emitir declaraciones sobre la política nacional; pero varios personeros han estado pidiéndole pronunciamientos en materia de política nacional, que a una alta funcionaria de Naciones Unidas le está prohibido. Y luego, sobre materias internacionales, para lo cual está el secretario general de Naciones Unidas, que tiene la vocería. Hay un desconocimiento y aptitud obsesiva de tratar de sacar al pizarrón a la ex Mandataria. Y muchas veces con una actitud en que se le falta el respeto a lo que fue su cargo y su condición.
-A usted se le acusa de lo mismo, de faltarle el respeto a la ministra Pérez...
-Justamente, el punto es que lo que decía ese tuit: Que a la Presidenta se le pedían declaraciones, incluso sobre algo -en broma- como el exceso de temperatura en Santiago. Entonces, por cierto, lo que hoy día hay es esta obsesión por la Presidenta. El canciller (Roberto) Ampuero, refiriéndose a la Presidenta, diciendo que su llamado al diálogo en Venezuela no es suficiente, que tiene que ir mucho más allá. Entonces una tras otra. A eso apuntaba esta caricatura, que por lo demás el mismo caricaturista me ha realizado caricaturas a mí.
-¿No siente que toda esta reacción tiene que ver más con criticar a Heraldo Muñoz, potencial candidato presidencial de la oposición?
-Puede ser por eso; pero yo más bien tiendo a pensar que están tratando de distraer la atención y cambiar de tema por las declaraciones del ministro de Obras Públicas (Juan Andrés Fontaine), diciendo que los derechos de agua deben ser a perpetuidad y eso ha causado una reacción muy amplia de rechazo, porque el acceso al agua es un derecho humano y tiene que estar disponible para el consumo de la gente y para los agricultores, no para los especuladores. Yo creo que como es verano, están las vacaciones y no hay mucho tema y para tratar de cambiar estas declaraciones desafortunadas del ministro del Obras Públicas respecto al proyecto de aguas. Probablemente, es eso más que lo que yo represento potencialmente.
-¿Y lo que representa es la carta más potente hoy para ser candidato presidencial?
-Mire, quién sabe. Uno nunca puede definir el futuro cuando está en el mundo del servicio público y de la política. Y quizás sea una posibilidad, pero hoy soy el presidente del Partido por la Democracia. Si mi nombre genera en el partido y en la ciudadanía apoyo, lo consideraré, pero por ahora no está sobre la mesa. Y en eso soy muy sereno en decirlo. No he tenido la aspiración de ser candidato presidencial. He estado satisfecho de desempeñar un cargo tan significativo como canciller de la República, pero cada cosa a su tiempo.