Vicente Pereira Parra

El rector del Colegio Da Vinci de Puerto Montt, Francisco Oshiro Riveros, es enfático en señalar que el plantel educacional cumplirá lo establecido en el fallo de la Corte Suprema, que, en el caso conocido como protección del humedal Llantén, les ordenó reubicarse en un plazo de tres años.

Oshiro no duda en que esto se cumplirá; pero aclara que ello no significa que el establecimiento abandone el lugar donde se encuentra emplazado, en la parte alta de Puerto Montt (Jardín Oriente).

-¿Cómo han sido estos meses, tras el dictamen de la Corte Suprema?

-Con respecto al fallo, se tiene que cumplir. Hemos tenido reuniones con distintas entidades de Gobierno, como la Seremía de Medio Ambiente. También, he participado de actividades de la Seremía y la Dirección Provincial de Educación, así como acercamientos con el Serviu. Hemos realizado una serie de acciones tendientes a dar respuesta a este fallo.

Oshiro afirma que están claros de que el establecimiento no está en el humedal. El mismo convencimiento de que la vía de escurrimiento se encuentra fuera del recinto. "No pasa por nuestro establecimiento y si uno hace historia, este sector del humedal (en la parte superior) se ha visto afectado por intervención del ser humano", subraya.

Recuerda -además- que la construcción del colegio se realizó con todos los permisos correspondientes y cuyos estudios previos se encuentran aún vigentes.

Por lo mismo, hoy están analizando cuál será el camino a adoptar, dado que la Seremía de Medio Ambiente inició mesas de trabajo con el municipio, con el Serviu y con otras entidades; además que el colegio ha sido invitado a algunos seminarios con respecto a humedales, así que "vamos a ver cómo solucionamos el tema, porque aquí hay varios involucrados".

-¿Cuando usted habla de que el fallo es para cumplir, puede significar salir de su actual emplazamiento?

-No. Aquí hay que tener mucho cuidado. El fallo dice que el colegio se tiene que reubicar; por lo tanto, la vía puede ser dar un metro del lado donde se podría facilitar el escurrimiento, cambio mi ubicación, se reubica y se cumple porque se diferencia a lo que había originalmente.

-Entonces ¿reubicación y no salida del lugar?

-Hay algo súper importante que dejar claro: el fallo dice que el colegio se tiene que reubicar. No dice que se tiene que cerrar, ni tampoco trasladar ni que tenga los permisos o que no cumpla con normativa legal. La vía de evacuación de agua no pasa por el colegio.

Según explica, cuando se está frente a un fallo como el de la Corte, se tienen que ver diversos factores. "Tenemos los permisos de la DOM, del Mineduc, que no son de ahora", dado que el colegio está por cumplir su primera década de vida.

Otro factor es la comunidad educativa, de unos 400 estudiantes. "Nosotros tenemos la mejor disposición. Creemos en que se tiene que conservar el Medio Ambiente, que es un tema fundamental y es un área que trabajamos como colegio".

-¿Este tema se ha visto reflejado en el proceso de admisión?

-Nuestro procedimiento es decir siempre la verdad. Hemos tenido reuniones con todas las directivas de los cursos, hemos entregado información oficial, no la que nosotros creemos. Y hemos tenido la adhesión de todos nuestros apoderados. No hay ningún alumno que se fuera por este tema y en el Sistema de Admisión tenemos muy pocas vacantes y hemos abierto dos cursos. Tengo el colegio casi completo el 2019 y hemos cumplido con todo.