Pedro Barcena González
Los temores de los familiares se convirtieron en una cruda realidad. Acusaban el mal estado de la embarcación en que trabajaban sus seres queridos. Y la lancha zozobró con sus cuatro ocupantes. Un naufragio que dejó tres pescadores castreños fallecidos y un sobreviviente.
La emergencia quedó en evidencia tras el llamado que efectuó Mario Hernández Soto (43), patrón de lancha a motor Lasquen, quien se encontraba en faenas de pesca al este de la Isla Grande, en las proximidades de Punta Chumildén, comuna de Chaitén.
El llamado de auxilio fue recepcionado por la Capitanía de Puerto de Quemchi, en el cual se daba cuenta que la nave tenía una vía de agua incontrolable, solicitando apoyo inmediato ya que comenzaba a hundirse.
Dispositivo
De esta forma, como advirtió el gobernador marítimo de Castro, Héctor Aravena, se activó el operativo de rebusca. "A través de sistemas internos de última posición se buscó proyectar el área donde podría encontrarse la nave siniestrada", aclaró.
Este análisis arrojó que el navío estaría cerca de la desembocadura del estero Reñihue, provincia de Palena. Por ello, se estableció un punto a 5 millas al oeste de ese sector para concentrar la búsqueda. Zarparon cinco patrulleras de la Armada, pero igual se requirió el apoyo de naves particulares.
"Por medio de sistemas satelitales y de control marítimo determinamos que había cuatro embarcaciones operando en el golfo de Ancud y las cercanías de este sector. Efectuamos los enlaces para solicitar el apoyo y contribuir en la rebusca", acotó el capitán de navío.
Justamente, alrededor de las 22.15 horas del jueves, el remolcador menor Don Jacob informó sobre el hallazgo los cadáveres -dos de ellos flotando- y el sobreviviente, de la lancha siniestrada que permanecía semihundida con solo parte de la proa aflorada.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Juan Aquiles Aguilar Cartes (54), Arnoldo Segundo Ruiz Raimilla (56) y Diego Marcelo Cuyul Cayún (27).
"Nuestras unidades llegaron y constataron el hallazgo, como también los restos náufragos alrededor. El sobreviviente (Hernández Soto) estaba con principio hipotermia y en estado de shock", apuntó el jefe de la Guarnición Naval Chiloé.
Los tripulantes fueron remitidos a Castro en dos patrulleras tipo arcángel, recalando la primera de ellas alrededor de las 0.15 horas de este viernes en el muelle de la Gobernación Marítima castreña con el pescador que salvó con vida. Luego, cerca de la 1 de la madrugada arribó la otra lancha con los tres fallecidos.
Una vez en tierra, el patrón de la nave fue auxiliado por personal del Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU) y remetido en ambulancia hasta el Hospital Augusto Riffart.
Según el reanimador de turno, Fernando Gavilán, el paciente "estuvo expuesto a las bajas temperaturas del mar al menos dos horas y media. Recibió los primeros auxilios por parte de funcionarios de la Armada y luego evaluado por SAMU. Fue estabilizado y trasladado al servicio de urgencia del hospital".
Como detalló el enfermero el isleño presentaba signos de hipotermia, de moderada a severa, no registrando lesiones aparentes. "Se le realizó el control de temperatura y monitoreo cardiovascular. Estaba consciente y con labilidad emocional", aclaró.
Indagatoria
Una vez asegurada la vida del tripulante comenzó de inmediato la investigación sumaria por parte de la Armada. Dentro de los primeros antecedentes, como manifestó el comandante Aravena, se indicó que la Lasquen zarpó con documentación en regla, pero declaró solo tres ocupantes, sin aparecer en los registros el más joven de los afectados, el único que no era personal marítimo.
Eso sí, como advirtió el oficial, la indagatoria formal la realiza la jurisdicción naval de Puerto Montt, por competencia territorial. No obstante, ya emergieron los primeros datos con el testimonio del sobreviviente.
"En las primeras declaraciones del patrón, señaló que tenían una vía de agua no controlada. No la pudieron contener con la bomba, que estaba inoperativa, y con los baldes no hicieron nada, así que la lancha quedó semihundida. A los tripulantes los afectó la hipotermia y estaban con los chalecos salvavidas puestos", detalló la fuente.
Las circunstancias que rodearon el naufragio todavía no se esclarecen, pero ya se avizoraron algunas fallas en la embarcación, como la misma falencia de la motobomba. Incluso, parientes de las víctimas no dudaron en señalar que la nave zarpó con problemas a cuestas.
Así lo sostuvo Jasna Ruiz Cornejo, hija del mayor de los fallecidos, quien explicó que los parientes se enteraron del siniestro alrededor de las 21.30 horas por medio del hermano del dueño de la lancha.
"Nos llamó para indicarnos que habían tenido un accidente, que a la lancha le entró el agua y que Alejandro (Hernández), el dueño, llamó a las 19.40 diciendo que se estaban hundiendo y que estaban en el puente esperando que los salvaran", señaló la vecina.
Agregó que a través de su propio padre "supimos que la lancha estaba en mal estado y el dueño estaba enterado que su lancha estaba mala. El lunes cuando se fue a navegar le dije a mi papá que no se fuera, pero por las necesidades económicas se embarcó".
La mujer exigió justicia, asegurando que este accidente se debió a "una negligencia del dueño de la lancha... falleció mi papá y él quedó vivo, así que debe responder, va a tener que pagar con cárcel".