Vicente Pereira Parra
No hay caso. No quieren salir. Así de simple. Tal y como lo reconocen las autoridades, respecto a que no hay forma de poder convencer a las personas en situación de calle que habitan en el centro de Puerto Montt de que puedan irse a vivir a un albergues, donde hay capacidad para recibirlos.
Así lo corrobora el alcalde de Puerto Montt, Gervoy Paredes, y la seremi de Desarrollo Social, Soraya Said, quienes siguen trabajando en la forma de poder trasladar a estas personas a un sitio que presente mejores condiciones que la calle, que es donde viven, específicamente en Illapel, en uno de los accesos al Mall Paseo Costanera y a la tienda Paris.
En el consumo de drogas y de alcohol radican las razones por las que no quieren salir, según admite Said, quien además precisa que a Illapel no sólo llegan personas en situación de calle, sino que también quienes vienen de otros puntos de la zona y que no están en situación de calle.
Para Said, se les tiene que proporcionar un apoyo en el área psicosocial y más allá, dado que es un "problema de salud mental".
En tanto, Gervoy Paredes, alcalde de Puerto Montt, comenta que están trabajando con Desarrollo Social para poder sacar a estas personas. "Nosotros les vamos a colaborar. Y así se lo dijimos. Y yo creo que será complejo porque el lugar (albergue) no está ubicado de manera estratégica (Presidente Ibáñez), pero nosotros prestaremos toda la ayuda que sea necesaria. Tenemos un compromiso con la seremi en el sentido de que la colaboración que realice el municipio sea a través de la implementación", comenta el edil.
Paredes reconoce que se trata de un tema que ha sido bastante complejo, porque no quieren salir o vuelven. "No hay caso. No quieren salir y no hay forma de sacarlos. Los sacan un rato; pero luego vuelven. Ha sido imposible, incluso nosotros tenemos buenos fondos en el programa de calle, pero ha sido imposible", insiste. Además, subraya que como municipio les han ofrecido de todo, pero sin resultados positivos.
En Desarrollo Social, la seremi realizó un análisis de la situación con el Hogar de Cristo. Y la conclusión es la misma que han tenido todo el año: que las personas que viven en Illapel y que son siete, no adhieren a ningún albergue. Ellos, por lo demás, están identificados por la Ruta Social. "Esto no pasa por hacer albergues de emergencia. De hecho, hoy día el Hogar de Cristo tiene un sobrecupo y tiene una capacidad actual para 25 personas más", recalcó.