El sauce plantado por Manoly no es el único árbol patrimonial derribado en la historia de Puerto Montt. Un encino, que dejó en pie Vicente Pérez Rosales durante la fundación, y que se ubicaba en la esquina sur oriente de Plaza de Armas, fue cortado en 1940 durante una remodelación del espacio. "El árbol tenía una placa en alemán que daba cuenta del lugar de la fundación de Puerto Montt y de la llegada de los colonos germanos", indicó César Sánchez.
Si hay un hombre que vivió intensamente la caleta de Angelmó y el Barrio Puerto fue Manuel Maldonado. Y es que Manoly no sólo plasmó a la caleta en sus óleos, sino que también desarrolló iniciativas para mejorar el sector.
En su profunda conexión con el mundo náutico, el artista fallecido en agosto de 2011, diseñó y construyó en 1964 el Monumento al Hombre del Mar, inspirado en el capitán Luis Alcázar y ubicado en una pequeña rotonda emplazada en la intersección de las calles Chorrillos, Independencia y avenida Angelmó, frente al ingreso al recinto portuario.
"El monumento consistía en un faro de cemento, pintado de color ladrillo, el que estaba rodeado de gruesas cadenas marineras de estrabón grande, como las que tratan las anclas de los buques. Fue inaugurado el 28 de enero de 1964, por iniciativa de la Empresa Marítima del Estado (Empremar). El diseño y construcción del espacio fue hecha por el destacado pintor local Manuel Maldonado, conocido como Manoly", confirma el historiador puertomontino César Sánchez.
Pasaron los años y el monumento desapareció. El único vestigio de la obra era un sauce, plantado por el mismo Manoly, el que fue talado esta semana.
"Mi familia, que vive en Angelmó, me avisó que estaban cortando el sauce que plantó mi abuelo en 1964, y luego me enteré, a través de las redes sociales, que había una profunda molestia ciudadana por la tala del árbol", contó a El Llanquihue el diputado Alejandro Bernales, nieto del pintor.
El parlamentario indicó que varios vecinos del sector, entre ellos algunos de sus familiares, advirtieron a los trabajadores que llegaron a talarlo que el sauce había sido plantado por Manoly, pero indicaron que una nueva paisajista había ordenado cortarlo.
Bernales agregó que en vida su abuelo, de manera constante, recordaba el árbol hoy ya desaparecido.
"Sostenía que era la única huella que quedaba del monumento al Hombre de Mar, que fue una sus obras públicas, y por la cual han habido esfuerzos de distintas agrupaciones ciudadanas por reconstruirlo, aún sin éxito", indicó.
Consultado al respecto, el administrador municipal de Puerto Montt, Carlos Soto indicó que "el municipio lamenta este hecho, y no tiene en el ninguna responsabilidad, fue una decisión inconsulta, llevada adelante por la empresa Siglo Verde, encargada de la concesión de servicios de áreas verdes de la comuna".
Adicionalmente se dispuso que la Unidad de Aseo y Ornato para que realice las acciones administrativas y se proceda, si corresponde, aplicar sanciones a la empresa.
"De manera adicional, se instruyó que la empresa realice obras de mitigación o compensación en el lugar donde se emplazaba este simbólico árbol, las características y materialidad de la misma serán definidas en paralelo a las sanciones que puedan aplicársele a la empresa", indicó Soto.
Desde la empresa Siglo Verde, el ingeniero agrónomo y representante legal Carlos Parraux, explicó que la tala se adoptó porque el árbol se encontraba enfermo y "su tronco estaba podrido en el interior".
Indicó además que el 20 de marzo se realizó una poda de su follaje para permitir la visión de los automovilistas, y que el 14 de abril se realizó una poda aérea para facilitar la visión de las cámaras de seguridad, ocasión en que advirtieron el mal estado del tronco.
"Desconocíamos el valor patrimonial de este árbol, que fue talado como una medida de seguridad", sostuvo.