Puente Chacao
Su editorial del domingo 18.02 se refiere a las cartas recibidas y publicadas sobre el puente hacia la isla de Chiloé. Le abulto esta otra: en el primer período de la Presidenta Bachelet, su ministro Bitrán citó a una conferencia en Pto. Montt -a la cual asistí desde Osorno-, para informar públicamente la suspensión de dicha construcción a cambio de importantes inversiones en la isla: doble vía entre Ancud y Castro, ampliación del aeropuerto existente en la isla entre ambas ciudades, potenciar el puerto de Quellón para exportaciones marítimas directas, etc. El cruce seguiría en manos de los clásicos transbordadores actuales. Pasó el tiempo y en el siguiente período del presidente Piñera, se repuso el proyecto original del puente y éste continuó con el segundo y vigente período de la presidenta Bachelet, y curiosamente con su mismo ex ministro Bitrán, quien lo había rechazado años atrás. La actual crítica sobre este puente es su altura sin proyección para la evolución de la altura de los grandes barcos turísticos, mostrando su editorial aludido el alto que tendrá el puente y la necesaria para los barcos modernos: 59 mts. y asumiendo que los próximos modernos barcos superarán los 6O mts. Dudo de los 59 mts. e ignoro la diferencia en altura de las mareas chilotas, puesto que de ser así daría la impresión que los barcos podrían transitar en marea baja, desconociendo si el fondo resultante lo permitiría. No soy experto en mareas ni en el tema, pero sería imperdonable que esta inmensa inversión en el puente sobre el canal Chacao, emulara al Cau Cau y al cercano a Temuco.
DAVID BENAVENTE CRISOSTO.
Problemas similares
Quiero hacer eco del notable comentario del concejal Marcelo Salazar Vallejos el sábado (ellanquihue.cl/impresa/2018/02/17/full/cuerpo-principal/9/) en este mismo medio. El Sr. Salazar denunció la mentalidad cortoplacista de la Cámara de Construcción y la forma en la que esta opera: a través de distintos proyectos inmobiliarios, que lucran y cuyo avance nos aleja de un objetivo de desarrollo urbano real. Del mismo modo y para defender su accionar, insisten en su "derecho" a armar una ciudad a su gusto. Agregando que se sienten "vulnerados" si son criticados o si los ciudadanos exigen protección por su entorno, por su salud o por el medio ambiente. Victimizándose y distorsionando la realidad.
Sr. Salazar es concejal de Puerto Varas, pero aquí en Puerto Montt tenemos problemas bastante similares.
En Puerto Varas, el lago Llanquihue se llena de residuos y aquí en Puerto Montt el borde costero y las playas son un asco. Ambas ciudades también gozan de Centros Comerciales pocos sensibles con la realidad del entorno y son blancos del "desarrollo" desenfrenado por parte de estas inmobiliarias - que publicitan la "naturaleza" de sus proyectos mientras que en realidad la destruyen.
Uno de los más notables ejemplos de esta mentalidad que describo en Puerto Montt, es el proyecto inmobiliario de la empresa Pocuro, Portal del Sur, en Panitao. Proyecto que pretende armar una ciudad de 40.000 habitantes. Sin estudios viales, sin escuelas, sin todo lo que necesita una comunidad de ese tamaño y, por supuesto, echando las aguas servidas en un río sin caudal durante parte importante del año. Para rematar, todas estas casas estarían construidas sobre un antiguo vertedero de salmones. La constructora niega que construyeron encima del vertedero, pero ha hecho todo lo posible para evitar un estudio ambiental de su proyecto para comprobarlo, algo que nosotros, los vecinos de Panitao, hemos venido exigiendo por ya más de tres años. Creemos que un estudio confirmaría la existencia del vertedero y la inviabilidad del proyecto como se presenta, tal como señalan varios testigos en el siguiente video de You-Tube: https://www.youtube.com/watch?v=bJ2YG3-7WYw.
Pero el problema no es sólo con Pocuro. En Puerto Montt tenemos más inmobiliarias con proyectos prepotentes e invasivos del medio. Tal es el caso de Socovesa, que está realizando una intervención nefasta sobre el Humedal Antinir en el sector Alta Vista, junto a lo que se suma la contaminación de las aguas de la laguna, por medio del escurrimiento de aguas servidas provenientes de las alcantarillas administradas por a empresa Essal. Por otro lado, está la constructora GPR, responsable de la destrucción del Humedal Llantén.
Pero, en Puerto Varas, por lo menos, el alcalde y los concejales están respondiendo a los reclamos ciudadanos y al sentido común. Han desarrollado un Plan Regulador sensible, y ya tomaron medidas para postergar permisos de edificación, dada la falta de garantías técnicas de infraestructura sanitaria, vial y medioambiental.
Entonces, ¿qué pasa en Puerto Montt? Lamentablemente, muy poco. Ni el alcalde ni los concejales (con la excepción de tres o cuatro) han mostrado el mismo coraje y visión que tienen el alcalde y concejales en Puerto Varas. La mayoría aquí, en Puerto Montt, prestan ropa a Pocuro, Socovesa y GPR. Así que es hora que tomemos la iniciativa. Todos.
STEVE ANDERSON. JJ.VV. Panitao Bajo. Corporación Chucao.