Todo lo que se planifique -y que ojalá se concrete oportunamente-, con ánimo restaurador de la principal calle céntrica de la ciudad -Antonio Varas-, será siempre bienvenido por la comunidad puertomontina, que ya está colmada de soportar el deterioro generalizado y las incomodidades que, paradojalmente, ofrece la principal arteria urbana de la capital regional.
El proyecto denominado "Mejoramiento Paseo Antonio Varas", es liderado por el municipio. Y se desarrollará en tres etapas, desde Salvador Allende hasta Diagonal Germania. La primera tarea, hasta calle Chillán, será el soterramiento total de los cables que tanto afean la ciudad y contaminan visualmente. Para lo cual ya se cuenta con la buena disposición colaboradora de las empresas eléctricas y operadores de telecomunicaciones, mientras que un equipo municipal multidisciplinario ya está trabajando en la planificación de esta prioritaria obra.
Esta es una necesidad de hace muchos años, de la que se ha hablado mucho, pero concretado nada. Pero, habiendo llegado el tiempo de responder -manos a la obra- a esa aspiración, la voluntad ciudadana es de confianza en esos planes y de disposición colaborativa.
Se supone que después de la instalación subterránea del cableado en calle Varas -que se planifica en transformar en un gran paseo peatonal tipo bulevar-, vendrán los trabajos de la definitiva restauración de la calzada y aceras de esta vía, cuyo calamitoso estado de deterioro actual es la peor carta de presentación turística que puede tener Puerto Montt ante el visitante. Y la molestia más patética para los propios porteños, que incluso se han accidentado caminando sobre los hoyos de las veredas. Tampoco son un aporte estético en esa histórica calle, los pilares que allí quedaron tras el fallido proyecto de bulevar, que ahora sólo sirven para acumular burdas propagandas y entorpecer a peatones.
Por todo eso, bienvenido sea el proyecto de "Mejoramiento del Paseo Antonio Varas", que con mucha urgencia lo necesita.