Hija de Tompkins demanda la nulidad del testamento que la excluyó como heredera
TRIBUNALES. La acción legal, que fue presentada el viernes en el Juzgado de Puerto Varas, no pretende poner en riesgo los parques donados al Estado.
El viernes 20 de octubre, ante el Juzgado de Letras de Puerto Varas fue presentada una demanda en la que Summer Tompkins, hija del fallecido empresario y filántropo Douglas Tompkins, solicita ser reconocida como heredera de su padre.
La hija del millonario ecologista -quien murió en un accidente en kayak en el lago General Carrera en diciembre del año 2015-, fue dejada fuera del testamento; por lo que busca restituir sus derechos mediante la nulidad, o en su defecto la reforma de éste.
En la demanda, que es patrocinada por el abogado Florencio Bernales, del estudio de abogados Cariola Diez Perez-Cotapos, que representa a Summer Tompkins, se explica que se pretende obtener los derechos que le corresponden como legítima heredera de Douglas Tompkins.
En la demanda se argumenta que se creó una estructura legal con el único objetivo bloquear el acceso de sus herederos a los bienes del empresario, contraviniendo explícitamente la legislación chilena, país en el que el fundador de North Face y Esprit residió por más de 20 años, y donde falleció.
Consultados los abogados de la hija de Tompkins, no quisieron hacer mayores comentarios, pero aseguraron que esta reclamación no persigue poner en jaque el legado del ambientalista a través de los parques entregados y comprometidos al Estado chileno, que se encuentran bajo la administración de fundaciones.
Afirman que la fortuna que dejó el empresario permite preservar su legado, y a la vez cumplir con las obligaciones de herencia que exige la ley.
La demanda
Según publicó este domingo, El Mercurio, la demanda, de 55 páginas, comienza consignando dos acciones principales. En la primera se pide la "nulidad absoluta" del testamento, en contra de The Douglas R. Tompkins Revocable Trust -representado por Kristine McDivitt Tompkins, la viuda del ambientalista, y por Debra Ryker, también de nacionalidad estadounidense, domiciliada en el estado de California-, y en contra de ambas individualmente, en su calidad de coadministradoras del trust.
El objetivo de esta primera acción es que se declare la nulidad absoluta del testamento otorgado el 23 de marzo de 2012 por Douglas Tompkins, y, de este modo, se apliquen las normas legales chilenas que rigen la sucesión intestada.
La segunda acción -pensada en el caso "improbable", según la demanda, de que se estimase el testamento como válido- plantea una "reforma de testamento". Esto, con el fin de que se determine "que no se ajusta a derecho por no respetar los derechos hereditarios de nuestra representada, doña Summer Tompkins Walker, quien reviste la calidad de legitimaria forzosa por ser hija" de Tompkins, de forma tal que se modifique dicho testamento y ella pueda concurrir a la herencia en la porción que procede, de acuerdo a la ley.
Luego, el texto contiene una relación pormenorizada de cómo -según la demanda- se sucedieron los hechos.
Comienza señalando que al momento de su muerte, Tompkins se encontraba casado con Kristine McDivitt, con quien no tuvo descendencia, pero él sí tenía dos hijas de un matrimonio anterior: Quincy Tompkins Imhoff, y Summer Tompkins Walker, esta última la gestora de esta acción legal.
Plantea que desde 1992 y hasta su muerte, Tompkins vivió en Chile, con domicilio último en la comuna de Puerto Varas. Por tanto, plantea el texto, la ley aplicable a la sucesión de los bienes es la de su último domicilio -Chile-, independiente de la nacionalidad del fallecido.