Los puertomontinos se impregnan de orgullo y se sienten reconfortados y animosos, cuando el deporte local hace noticia y prestigia a nuestra ciudad puerto. Como ha ocurrido con el bisoño plantel de Puerto Montt, que acaba de coronarse brillante Campeón Nacional de Básquetbol Sub 17 de este año en el torneo librado en Punta Arenas. Proeza que viene a confirmar el promisorio porvenir que exhibe hoy el baloncesto de la capital de la Región de Los Lagos.

Fue una campaña sobresaliente la de los chicos porteños en la austral palestra. Una cruzada invicta, donde ganaron todos los partidos de forma contundente, a través de una actuación demoledora, de notable rendimiento basquetbolístico colectivo y deslumbrante calidad individual. Que acaparó las loas y la admiración de los entendidos y del público en general. Y que vio en ellos no sólo destreza y potencial, sino que también corrección, caballerosidad y el más alto espíritu deportivo. Todo un ejemplo dentro y fuera del rectángulo de competición.

Con esta gran conquista, para el básquetbol de Puerto Montt -en sus series menores, que es donde está su porvenir- el 2017 surge como un año de importantes logros tanto en damas como en varones, como así lo destacara el presidente de Asobásquet, Javier Rojas. Para quien estos triunfos no son más que la expresión del renacer de este deporte en la capital regional, que actualmente muestra más clubes, mayor representación en justas nacionales y más actividad. Sinónimo de un futuro confiable y fructífero.

Coincidentemente, por estos días de septiembre de 1967, hace 50 años, -como recordamos en nuestra sección Ocurrió, hace 50 años-, Puerto Montt obtenía el vicecampeonato nacional juvenil de básquetbol, tras caer en dramática final 44-41 ante Santiago, en el gimnasio de calle Lota, la sede.

Reconforta ver crecer deportivamente a Puerto Montt desde sus semilleros. No sólo el ciclismo, el remo, las artes marciales, el fútbol, dan que hablar. También, el básquetbol deslumbra. Lo que es señal de que vale la pena preocuparse de la cultura física.

Con desilusión hemos visto cómo en el último tiempo el hermoso Lago Llanquihue, en Puerto Varas, ha sido víctima de una grave contaminación producto de la descarga irregular de aguas servidas. Situación que quedó en evidencia todavía más este fin de semana, cuando vecinos denunciaron con fotografías y videos cómo desde un ducto que iba desde la ciudad al lago salían excrementos. Esta situación no solamente es vergonzosa, sino también preocupante, porque puede provocar daños incuantificables a la industria turística de Puerto Varas y de toda la cuenca del Lago Llanquihue, considerando que ésta es una de las principales y que genera mayores ingresos a nuestra Región de Los Lagos durante todo el año y, más aún, en verano. Cuando conmemoramos el Día Mundial del Turismo, y sobre todo porque próximamente se efectuará un encuentro internacional sobre la materia en Puerto Varas, no podemos permitir, como autoridades y ciudadanos, que este tipo de situaciones ocurra en uno de los principales destinos del país. No lograremos ser capital del turismo nacional e internacional si no cuidamos nuestro más importante atractivo regional. Tan grave es lo que enfrenta Puerto Varas, que debemos actuar todos unidos: autoridades, vecinos, operadores turísticos y comunidad, para encontrar una solución a la brevedad, por más complejo que sea el problema. Si bien el municipio ya presentó una demanda ante el Tribunal Ambiental de Valdivia, creemos que esta acción no es suficiente, pues aún no se paralizan las actividades de la empresa Essal. Oficiamos al Consejo de Defensa del Estado para que se haga parte de esta querella, ya que es el organismo que tiene la obligación legal de presentar demandas por daños ambientales. La Constitución, en su artículo 19 inciso 8, establece que es deber del Estado preservar, conservar y proteger el patrimonio ambiental de la nación. Debemos actuar con firmeza y utilizar todas las instancias respectivas, administrativas, legales y constitucionales, para sancionar a los responsables y detener este daño ambiental al lago, que no sólo afecta la imagen de Puerto Varas, sino también de toda la Provincia de Llanquihue.

Fidel Espinoza Sandoval.

Diputado de la República. Región de Los Lagos.