Después de conocerse, hace poco, la determinación de otorgarle, en adelante, la hegemonía nacional, -en la recepción de los grandes cruceros marítimos internacionales que anualmente llegan a Chile-, al puerto de San Antonio en la zona central, para los puertomontinos se trata de un acontecimiento que por estos confines tiene un significado especial por la vinculación local con esta gigantesca industria oceánica global.
Como se sabe, Puerto Montt recibe cada año, en la temporada estival, a varias decenas de estos mega transatlánticos. Por cuya atención se esmera en superarse siempre cada vez más. Y ante lo cual -eso sí- se deben reconocer algunas limitaciones que lo impiden. Como la falta de mayores espacios de atraque portuario y de un equipamiento más acorde a los tiempos, en cuanto al servicio en tierra para el expedito despacho de los pasajeros a los principales sectores de atracción turística de nuestra provincia.
Una iniciativa que, al respecto, está rondando en el último tiempo y que va adquiriendo cada vez más volumen, se refiere a la habilitación de un terminal exclusivo para estos gigantescos cruceros. Se erigiría en las inmediaciones del ex puerto petrolero, Pichi-Pelluco, de estratégica conexión con la Carretera Austral y zona del Lago Llanquihue.
Con esa finalidad, en mayo de este año se anunció que comenzarían los estudios para definir el calado naviero factible en esa área, además de verificarse el comportamiento de las mareas y del viento, que son los factores claves para concretar la obra.
Se trata, sin duda, de un interesante proyecto, que desde nuestra bahía reforzaría grandemente el porvenir marítimo-turístico de Puerto Montt. Junto con darle vía libre al histórico puerto de Angelmó, para que se desarrolle mejor, al servicio único del cabotaje nacional e internacional, significaría para nuestra ciudad puerto un espaldarazo determinante -en su consolidación como una de las bases trascendentes de la Patagonia- en el marco de la acogida chilena a la navegación crucerista por el extenso litoral de nuestro país.