Desafío de hacer comunas
Avanzar día a día en contar con municipios más eficientes y participativos, es, sin duda, una de las principales conclusiones emanadas del "Encuentro Nacional de Capacitación de Concejales". En ambas jornadas, los más de 700 concejales reunidos, representantes de los 345 municipios del país, nos informamos, reflexionamos y debatimos sobre el trabajo de representar a diario a la comunidad.
Sea a través de la aprobación o rechazo de presupuestos y ordenanzas municipales; del rol fiscalizador de verificar la correcta gestión del alcalde y el cumplimiento de los planes de inversión municipal; de la recomendación al edil de proyectos y medidas a priorizar; de dar acuerdo para dictar ordenanzas municipales; y, además, de fiscalizar y solicitar informes a empresas, corporaciones o fundaciones municipales. Así, como miembro del renovado Concejo Municipal durante el período 2016-2020, ser concejal es una oportunidad de hacer un trabajo serio, responsable y comprometido, para hacer cumplir las normas y los reglamentos existentes, donde la probidad y transparencia deben ser consecuencia de la acción del gobierno local que todos elegimos. Porque más que buenas voluntades, es una responsabilidad con nuestros electores y nuestra comuna. Es una oportunidad y desafío de recuperar la confianza y credibilidad de la ciudadanía en sus autoridades. Se trata de escuchar a la comunidad, aunar criterios y luchar por nuestros ideales, en el corto, mediano y largo plazo, para que la comuna de Puerto Varas siga siendo el lugar donde nos sentimos orgullosos de vivir y pertenecer. ¡Hagamos la Pega!
RENATO AICHELE HORN. Concejal Puerto Varas.
Aborto y salud pública
La validación constitucional de la ley sobre interrupción de embarazo en tres causales cierra, por de pronto, el debate que ha sido, en todo momento, más vehemente que coherente. A nadie ha convencido que no tuviese ya posición anclada en la profundidad de sus creencias y emociones. Abundaron los epítetos carentes de sustancia, desde la confusión entre zigoto, embrión y feto, hasta quienes mencionaron el aborto (por definición referido a embriones o fetos inviables) como tratamiento de eclampsia o incluso mencionando el aborto pre-parto, lo cual es un expresión carente de sentido; se habló de aborto libre, abortos forzados, homicidio, el zigoto como nasciturus, históricamente entendido como conceptus, y un contundente etc.
Ciertamente, cualquier decisión legal respecto del aborto procurado apaga llamas, pero deja brasas al rojo que siempre vuelven a encender un fuego. Sólo muy tangencialmente hubo referencias al problema de salud pública del aborto clandestino, que en otras latitudes fue el principal argumento para modificar legislaciones vigentes (Italia, Francia). Las escasas menciones variaron desde pronosticar que la clandestinidad aumentaría por esta ley restrictiva, hasta quienes daban por resuelto el tema gracias a las ventanas de permisión de la ley.
Es preciso llevar una estadística rigurosa sobre los casos de abortos médicamente inducidos a solicitud de la mujer en cumplimiento de las circunstancias que la ley contempla. Es el único dato cuantitativo que dará sustancia al análisis acaso la ley resuelve el tema de los así llamados embarazos problemáticos o vulnerables, o si sólo despenaliza oficialmente lo que la lex artis médica practica, no por solicitud de la mujer , sino por indicación médica.
MIGUEL KOTTOW LANG
Consultas previas
El caso Dominga, al igual que el de Hidroaysén, fueron iniciativas o mega proyectos que, en razón al rechazo de su desarrollo por razones ambientalistas más que técnicas o económicas después de sus extensos y onerosos estudios preliminares para llegar a la nada, dejan una advertencia conveniente de considerar para los próximos ejemplos similares, en este u otros gobiernos. Para evitar el alto costo de los estudios fundamentales que requieren dichos proyectos, convendría establecer una previa presentación de cada caso, adelantando las argumentaciones técnicas elementales, puesto que es difícil entender que una apreciación política o ambiental final - como la existencia de una colonia de pingüinos fuera de su ambiente patagónico o daño ambiental - fuese de tal importancia como para rechazar un importante proyecto después de años de gestación. Una previa consulta oficial para un proyecto de envergadura evitaría su estéril desarrollo. En el caso de Dominga, bastaba con desalentar a sus autores inicialmente - evitando su oneroso costo - al adelantarles que habiendo pingüinos cerca o arriesgando el correcto mantenimiento ambiental de la zona, era poco probable que este gobierno lo aprobara.
Como los actuales sondeos aseguran un cambio de gobierno proclive a un mejor desarrollo de la economía del país, Dominga podría presentarse nuevamente en el próximo período. Los pingüinos y los habitantes aledaños aprenderán a convivir.
DAVID BENAVENTE CRISOSTO.