Deslizamiento de tierra destruye dos casas y deja siete damnificados en la isla Tenglo
FRENTE A ANAHUAC. Una de las viviendas terminó en el mar con la totalidad de sus enseres en su interior. Inestabilidad de las laderas es otro efecto del sistema frontal.
En las aguas del canal de Tenglo, y con todos sus enseres en su interior, terminó la casa de Angélica Díaz luego que el inmueble fuera golpeado por un deslizamiento de tierra (remoción en masa), producto de la inestabilidad del terreno, tras las intensas lluvias que afectaron la zona.
Cerca de las 15 horas de ayer, un derrumbe golpeó la estructura dejándola en el mar. En la parte superior de una empinada ladera, ubicada en la costa insular frente a la caleta de pescadores de Anahuac, una segunda casa que ocupaba su nuera, Lisete Mayorga, quedó a punto de desplomarse equilibrándose sobre el cerro carcomido.
El deslizamiento de material se inició durante la madrugada, por lo que familiares y vecinos intentaron contener el avance del suelo resblancedido por las precipitaciones y por la presencia de una napa subterránea.
"A las tres de la mañana empezamos a trabajar con carretilla y pala, para afirmar la casa. Como al mediodía llegó una máquina que nos prestó el empresario Jorge Pacheco para despejar el material que había caído. Cerca de 20 minutos después que trabajó la maquinaria, se vino el derrumbe y se llevó la casa, habíamos como 10 personas trabajando y alcanzamos a saltar hacia los lados, sino nos agarra también", dijo Luis Mayorga, padre de una de las afectadas.
Como efecto de la emergencia resultaron damnificadas dos familias, que suman siete personas, tres de ellas menores de edad las que quedaron albergadas en casa de familiares. En el lugar se constituyó Carabineros, que aisló el lugar, efectivos de la Armada, voluntarios del Bote Salvavidas y personal de la oficina municipal de emergencias.
Desde mayo
Según indicó Lisete Mayorga a El Llanquihue, el deslizamiento que arrasó con las dos viviendas había comenzado a evidenciar sus primeros signos en mayo, con remociones en masa a pequeña escala.
"El derrumbe empezó arriba en mi casa el 22 de mayo, pero nosotros pedimos ayuda los primeros días de junio, porque de primera pensamos que no iba a ser necesario", indicó.
La pobladora agregó que solicitó ayuda de una maquinaria a la Municipalidad de Puerto Montt, pero esta no llegó.
Consultado al respecto, Fabián Becerra, director de Emergencia y Manejo del Riesgo del municipio, explicó que "no es posible intervenir con maquinaria municipal un terreno que es ocupado de manera irregular, y que además se ubica en una zona de peligro, de acuerdo al Estudio de Riesgos y Protección Ambiental de Puerto Montt desarrollado por la Universidad de Concepción".
El funcionario agregó además que hace algunos meses un equipo visitó el lugar afectado, por la remoción en masa registrada antes del inicio del invierno, recomendándole a tres familias hacer abandono del espacio ya que sus viviendas se encontraban instaladas en una zona de riesgo.
"En la oportunidad uno de los grupos ocupantes se retiró del sector, manteniéndose en el lugar otras dos familias", dijo Becerra.
Otros derrumbes
Durante esta semana, con el paso del intenso sistema frontal, se han registrado cinco remociones en masa en laderas de Puerto Montt.
Uno de ellos en el sector de Coihuín, dos en el área de Piedra Azul, uno en Chinquihue y el quinto en isla Tenglo. Esta condición había sido advertida por la saturación de los suelos por las intensas precipitaciones, por lo que se realiza el monitoreo de las laderas.