A un 62 % llega el endeudamiento regional con un promedio de un millón 179 mil pesos
POLÍTICA PÚBLICA. Mientras la seremi de Economía resalta efectos de planes de educación financiera, desde la Cámara de Comercio y Asociación de Consumidores piden reforzar ese programa y aplicar medidas para evitar la situación.
E n el sexto lugar del país se ubica la Región de Los Lagos, conforme al XV Informe de Deuda Morosa a diciembre de 2016, que elaboraron la Universidad San Sebastián y Equifax.
El estudio establece que en materia de participación de las personas con deuda al día, la región acumula un 62,8 %, aunque es inferior a la cifra reportada a igual fecha del año anterior (65,7 %). Sin embargo, en ambos años esos resultados la colocaron en el puesto seis.
Mientras que en el valor mora promedio, también se produjo un retroceso, al pasar de un millón 140 mil 122 pesos en 2015, a un millón 179 mil 393 pesos, lo que la hizo caer del 11° al 13° lugar en ese ranking.
Estas cifras fueron bien recibidas por la seremi de Economía, Carmen Gloria Muñoz. "Han surtido efecto los llamados que hemos hecho a través del Sernac, con los programas de educación financiera; como también la presencia de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento, que ayuda a reorganizar las deudas, no sólo a las empresas sino que también a las personas", dijo.
En ese sentido, la seremi Muñoz recordó el mensaje a que "el gasto tiene que ser en la medida que se pueda solventar y no sobreendeudarse. Siempre llamamos a comparar las diferentes ofertas de crédito y recurrir a los organismos de gobierno que prestan asesoría en estas materias".
Preocupación
No comparten esa apreciación en la Cámara de Comercio. El gerente general de esa entidad gremial, José Luis Flández, planteó que esos resultados "demuestran la necesidad de disponer con urgencia de algún programa de educación y cultura financiera, que permita a las personas priorizar un endeudamiento responsable para hacer frente a gastos de corto, mediano y largo plazo".
Expuso que existen pocas barreras de acceso al crédito, "sobre todo en el retail, que contribuyen a incrementar la cantidad y nivel de morosidad", por lo que postuló que no sólo se deben hacer esfuerzos para incentivar el consumo, sino que para "generar instancias de capacitación necesarias, para que ese consumo sea responsable".
Flández dijo que al gremio le preocupa que la región muestre una tasa de morosidad que se incrementó del 34% a un 37% entre 2015 y 2016, niveles que "se ven impulsados por el actual escenario económico, que ha generado pérdidas en la fuente laboral formal y migración a la categoría de cuenta propia, que no es mas que empleo precario y que merma los ingresos y las posibilidades para seguir pagando deudas adquiridas en condiciones más favorables".
También le inquieta que el informe dé cuenta del endeudamiento de jóvenes de entre 18 a 24 años, "que prácticamente no tienen poder adquisitivo, pero sí facilidades al crédito". A ello sumó que en los últimos tres años "se haya duplicado la cantidad de morosos en el segmento de personas de 60 años o más".
Probabilidad de pago
En tanto que Hernán Navarro, presidente de la Asociación de Consumidores (Cider), le inquieta el aumento de la muy baja probabilidad de pago. "Si en diciembre de 2013 representaban un 14,9% del total de morosos, a diciembre llegaba a un 18,3% del total de morosos; o sea, casi 800 mil personas no tienen posibilidad de pagar sus deudas y se exponen a la ejecución de sus bienes. Aquí también hace falta una política pública de amparo", expuso.
Por ello es que planteó que a nivel país se debe disponer de "una política de detención del endeudamiento. No basta con acciones de información y educación financiera. Se trata de medidas, como una defensoría del endeudado crítico o vulnerable", expuso.
Puso en evidencia el caso de quienes reciben bajos ingresos. "Existe un endeudamiento social en quienes ganan menos de $225 mil, que en los últimos tres años aumentan en un 56,6% y sus montos promedio suben en un 38,2%", detalló.
Por eso reclamó la existencia de "una política pública que evite el endeudamiento, a través de subsidios al emprendimiento o simplemente a la subsistencia familiar".