Marcelo Galindo Gallardo
En un acto de valentía, pocas veces observado en el Tribunal Oral en lo Penal (TOP) de Puerto Montt, fue la víctima quien declaró en contra de su padrastro; ello por el abuso sexual y violación a la que fue sometida cuando era una niña de sólo 13 años.
Ello, junto a otros testimonios y medios de prueba terminaron por convencer a los jueces, quienes encontraron culpable a Jorge Aarón del Río Mansilla del delito de violación reiterada y abuso sexual contra una menor de 14 años.
La sentencia fue categórica y el acusado deberá pasar 15 años de presidio en el penal de Alto Bonito.
La joven, que ahora tiene 18 años, narró las agresiones sexuales que sufrió a partir de los 10 años, de quien fuera su padrastro.
Producto de una de las violaciones, cuando la niña tenía 13 años , se convirtió en madre a penas cumplió los 14.
Tras diversas pruebas, se logró establecer a través del ADN que el padre de su hijo era su padrastro. El examen arrojó un 99,9 por ciento de certeza.
El niño tiene en la actualidad 4 años y vive con su mamá, mayor de edad, fuera de la Región de Los Lagos.
Protección
La fiscal Ana María Agüero, que llevó la causa, dijo que para la Fiscalía es importante, porque se obtuvo una sentencia de 15 años, donde se reconocen los delitos de abuso sexual y de violación en carácter de reiterado.
La representante del Ministerio Público destacó que "dentro de las líneas de persecución del Fiscal regional Marcos Emilfork, está la protección y la persecución de estos delitos cometidos contra niños, niñas y adolescentes. Lo que para nosotros cobra bastante relevancia, porque son los seres más vulnerables dentro de las víctimas; por eso, nosotros cada vez que investigamos este tipo de delitos no solamentemente vamos con los criterios jurídicos, sino que también le ponemos todo el corazón" y agregó que siempre "vamos a solicitar las penas que nos permita el ordenamiento jurídico para poder castigar a los hechores de este tipo de delitos", anotó. A través de la prueba presentada por la Fiscalía, donde destaca particularmente el crudo relato efectuado por la víctima, se acreditó que los hechos ocurrieron entre los años 2008 y 2012, en circunstancias que la víctima vivía junto a su madre y a su padrastro, Jorge Aarón del Río Mansilla, en una vivienda de población Bernardo O'Higgins.
El daño sufrido por la víctima
El Servicio Nacional de Menores (Sename) fue parte querellante. Para la directora regional Pamela Soto, la sentencia es ejemplificadora y lo que hizo la Fiscalía es destacable. "Sabemos que ninguna condena reparará el daño sufrido por la víctima, pero tener a los agresores de la infancia encarcelados, permite al menos evitar que cometan sus crímenes contra otros niños y niñas. Estamos muy conformes por esta condena; este se trata de un caso especialmente cruel y gravoso contra la víctima y esperamos que ella ahora pueda continuar su vida sin la angustia de saber que su agresor está libre".