No deja de llamar la atención que los pequeños-grandes temas, y algunos bastante importantes, -que preocupan a los puertomontinos en general-, hasta ahora no hayan sido enfatizados y acaso ni siquiera mencionados por los actuales aspirantes alcaldicios en sus respectivas campañas.
A los imperativos macros de salud, educacionales, de viviendas, estructurales urbanos y de conectividad, seguridad ciudadana, combate a la delincuencia, lucha contra la pobreza, entre otros, -abordados, con denuedo, por los postulantes municipales-, sería bueno añadir temas menores, pero influyentes en el cotidiano devenir de la gente.
Por ejemplo: la estresante problemática de la locomoción colectiva en Puerto Montt y Alerce, en sectores como Mirasol, tercera y cuarta terrazas de la ciudad, que amerita una pronta solución. La posibilidad de traslado del terminal de buses a la parte alta de la capital regional, para contribuir al descongestionamiento del constreñido centro urbano. La urgente necesidad de ordenamiento y optimización de la calle Varas en su calidad de motor comercial y turístico de nuestro puerto, comenzando por eliminar los pilares de triste recuerdo del fracasado bulevar y aportar mejores y más dignas oportunidades al comercio informal. Ver la opción de cambio de ubicación del Mercado Presidente Ibáñez hacia un nuevo centro cívico, que le permite mayor amplitud y capacidad para recibir una demanda que no cesa de crecer, y que a estas alturas tiene colapsado el sector donde actualmente funciona (iniciativa de la Cámara de Comercio). La recuperación de algunos patrimonios como el Monumento al Hombre de Mar, el Cacique Cayenel y el prometido homenaje a Mauricio de la Parra, creador de los Temporales Teatrales, mediante un monolito que lo recuerde, como también la instalación del busto de San Juan Pablo II en testimonio de su histórica visita a la bahía de Puerto Montt. Entre otras inquietudes y anhelos de muchos años, como la reposición del servicio ferroviario Santiago-Puerto Montt y estaciones intermedias.
Conviene -en el fragor de la batalla edilicia- que los candidatos no olviden estos temas, que también son esenciales en la integridad de Puerto Montt.