Como un nuevo paso en la tarea de reconstruir la deteriorada confianza en las instituciones, calificó el senador (PS) Rabindranath Quinteros al proyecto de ley que aumenta las penas para los delitos de soborno y cohecho.

La iniciativa, aprobada esta semana en general por el Senado, también aumenta la responsabilidad penal de las personas jurídicas en los delitos de lavado de activos, financiamiento del terrorismo y delitos de cohecho.

El senador Quinteros indicó que este es "un paso más en la tarea que se fijó este Senado en pos de mejorar los estándares de probidad y transparencia y reconstruir con ello la deteriorada confianza".

Dijo que, actualmente, las penas para castigar los delitos de cohecho y soborno son demasiado bajas y se necesita aumentarlas en sintonía con la gravedad que han adquirido estos delitos y el efecto que provocan en la sociedad, pues afectan la confianza y el orden de las instituciones.

Junto con valorar los alcances del proyecto de ley, Quinteros enfatizó que la señal debe ser clara y contundente para todos los que han traicionado al servicio público.

Marcelo Galindo Gallardo

Se autodenominó "el vecino cacho", y en los 10 días que estuvo en el condominio Los Avellanos de Trapén, ocasionó diversos problemas a los residentes, quienes lo denunciaron en cinco oportunidades por amenazas y otros hechos.

J. L. V. C. llegó el 9 de septiembre al condominio, donde se ubican alrededor de 85 parcelas con similar cantidad de familias, a conocer junto a una corredora uno de los inmuebles que estaba en venta.

Se trata de una casa de 180 metros cuadrados, cuyo propietario se encuentra residiendo en Canadá.

El sábado 10 de septiembre J. L. V. C. ya estaba viviendo en el lugar. Apareció con dos camionetas e incluso un caballo, con el que salió a recorrer el condominio los días de Fiestas Patrias.

A esa altura, las vecinas y vecinos ya temían por su seguridad, por todos los hechos que habían acontecido en más de una semana de estadía ilegal en la casa.

El Llanquihue intentó dialogar con J. L. V. C., quien brevemente dijo que había comprado la casa, pero cortó la llamada telefónica en forma sorpresiva, sin volver a contestar.

Camioneta

Sandra Huaiquín, residente del condominio, dijo que el sujeto se autodenominó "el vecino cacho" debido a los múltiples problemas que ocasionó en su corta estadía.

"Se empezó a meter a las casas donde había fiesta por las Fiestas Patrias. Se hizo notar desde que llegó, porque al segundo día de instalarse en la casa, salió con que le habían robado la camioneta, y al otro día la encontraron abandonada", relató.

La vecina añadió que después llegó con otra camioneta, que al parecer presentó una falla y quedó atravesada en un camino cerca de la laguna del sector.

"Pidió una grúa, y tuvo que llegar Carabineros porque no le cumplió al encargado de la grúa. Al tercer día llegó con un caballo haciendo una especie de rodeo, pero además el 17 en la tarde chocó en la carretera y lo detuvieron los Carabineros, pero el 19 hizo crisis porque atacó a una niña que estaba en la laguna con su pololo, quien estaba haciendo velerismo", indicó.

Otra de las situaciones ocurridas y relatadas por Nicolás, dio cuenta del ingreso del inusual vecino a la planta de agua potable.

"Todos los vecinos quedaron atemorizados por lo que puede hacer. Ese día cortó el agua, pero existe temor, aunque ayer (martes) la corredora tomó medidas, y lo sacaron de acá, y además encadenaron la cerca de la parcela que estaba ocupando", manifestó.

Gabriela Valdés también realizó una denuncia en la Fiscalía, cuyo caso fue tomado por el fiscal jefe Marcello Sambuceti.

"Estas noches, desde que se fue, no hemos dormido bien. En la Fiscalía nos dijeron que iban a pedir una orden de alejamiento. La policía hace su trabajo, pero la justicia no se hace cargo", comentó.

Los preocupados residentes del condominio Los Avellarelataron estar inquietos, porque -según ellos- el individuo, "no está bien y es capaz de cualquier cosa", indicaron.