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Fiscales calificaron de "despropósito" límites a opiniones

LIBERTAD. Uribe le dijo al fiscal nacional "que no se compre un problema gratis.
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La Asociación de Fiscales calificó de "despropósito" la petición del Colegio de Abogados al fiscal nacional, Jorge Abott, para normar la emisión de opiniones de los persecutores tanto en entrevistas como en redes sociales.

El organismo colegiado que preside Arturo Alessandri solicitó al Ministerio Público elaborar un instructivo de buenas prácticas para no "faltar a la ética ni afectar el debido proceso". El presidente de los fiscales, Claudio Uribe, manifestó que regular las opiniones de los persecutores "es un despropósito, es no entender que en este país existe libertad de expresión, que los fiscales tenemos un deber de transparencia para con la comunidad y que somos ciudadanos como cualquier otros".

El directivo afirmó que las limitaciones legales que tienen los fiscales "no significa que no podamos dar nuestra opinión en todo ámbito que quede fuera de esas prohibiciones legales. En definitiva, lo que está en juego son libertades básicas del sistema democrática". "Yo no veo un fundamento ético ni legal para poner una carga especial de prudencia sobre los fiscales distinta a la del resto de los ciudadanos", completó.

En este sentido, Uribe llamó al fiscal nacional a "que no se compre un problema gratis regulando una cuestión que es absolutamente innecesaria e inconveniente", porque una eventual orden que busque restringir su ámbito de acción puede tener consecuencias complejas. "Yo no voy a andar amenazando con movilizaciones, no es mi estilo, pero claramente sería objeto de malestar (para los fiscales)", advirtió. La polémica se instaló luego de que el fiscal regional oriente, Manuel Guerra, polemizara con los abogados Matías Kunsemüller y Mauricio Daza, este último querellante en el caso SQM.

Mayol: "La crisis dura todo lo que pueda ser necesario"

LIBRO. El sociólogo desmenuza en un ensayo la crisis de los grupos de poder desde lo que califica como "la muerte" de la elite.
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El sociólogo Alberto Mayol detalla en una nueva entrega literaria lo que -según él- serían las causas y síntomas de la actual crisis que exhiben los grupos de poder en el país. El académico acaba de publicar "Autopsia. ¿De qué se murió la elite chilena?" (Editorial Catalonia), para dar cuenta de las variables que, a su juicio, definen este fenómeno.

- ¿Por qué y de qué "murió" la elite chilena?

- Como cualquier elite, la chilena muere cuando la articulación de su pacto cupular es vista como ilegítima. En el caso chileno, mantener su legitimidad era difícil, pues se puso por delante al poder económico respecto del político y el primero es, por definición, un poder fuera de toda legitimidad. Con los escándalos empresariales se tornó ilegítima y con la compra de la política no hubo en la elite nadie a quién recurrir. La causa profunda de esta crisis es la sensación de injusticia y exclusión, expresada en la idea que ese pacto servía solo para hacer más poderosos y más ricos a los miembros de la elite a costa de los demá.

- ¿Cuánto durará esta crisis?

- La crisis dura todo el tiempo que pueda ser necesario para volver a articular una elite legítima, que pueden levantarla los mismos actores reorganizados o una nueva elite triunfante generada por los denominados impugnadores.

- El poder que pierde la elite, ¿dónde va, quién lo recibe?

- Lo recibe imperceptiblemente cada persona del país y su capacidad relativa crece. Sus críticas son más eficaces y los poderosos dejan de tener derecho a abuso. Pero es muy difícil de hacerlo tangible y normalmente las personas no lo detectan y sienten, de hecho, que tienen poco poder. Por eso quienes rentabilizan son quienes logran demostrar, o al menos simular, que el poder se fue donde ellos están.

- Si, como usted plantea, el poder económico se impuso al poder político dentro de la elite, ¿cómo y por qué revertir esta situación?

- El poder económico, como pasa hoy en muchos países, no puede estar a cargo de la sociedad. Se impone, sencillamente, por la abrumadora eficacia de su poder. Es completamente ilegítimo, pero se sigue imponiendo y su eficacia se traduce en capacidad de gobierno, pero no en gobernabilidad. Son sociedades al borde de la crisis y Chile es un caso extremo. Si la política no pasa adelante y no logra además tener un pacto que represente verdaderamente a la sociedad, esta crisis seguirá.

Rol de las instituciones

- ¿Qué papel le cabe a la Iglesia, a las Fuerzas Armadas y al Poder judicial?

-Iglesia, Fuerzas Armadas y Poder Judicial son actores de diferente importancia en la elite que también están en crisis. En gran medida, han operado en Chile como instituciones capaces de usar su potencia de "prótesis" y así conseguir rearticular el poder de las elites gracias a sus acciones. La Iglesia resolvía las crisis políticas de los noventa, el Poder Judicial informaba que los miembros de la elite no habían delinquido, las Fuerzas Armadas eran convocables para otorgar orden (orden es siempre volver al poder de una elite).

- ¿Cómo ve al movimiento estudiantil y su poder impugnador?

- Los estudiantes supieron administrar el momento de la crítica, pero cuando la crisis llegó muy lejos, el movimiento necesitaba dar una demostración de ser una alternativa política real. No lo han hecho, aunque han existido modestas insinuaciones y algunos -también modestos - fracasos.