¿Otro Alerce en Panitao?
Hace un año le escribí a Ud. una carta expresando la preocupación de la comunidad del borde costero (Panitao, Ilque, Huelmo, Trapén), respecto a la construcción de inmobiliaria Pocuro de "Portal del Sur Panitao", gestionado por Sr. Erwin Mueller, que pretende construir 10.000 casas en el sector de Panitao (al menos 40.000 personas habitando ahí en los próximos años). O sea, otro Alerce en camino - con todas las deficiencias que hemos visto con el primer Alerce -, de transporte, educación, bomberos, seguridad ciudadana, robos y muchas más. La pregunta que nos hacemos los habitantes en el borde costero es ¿queremos que nuestra zona rural se convierta en una ciudad satélite donde viven más de 40.000 personas y que además pone en riesgo nuestras napas de agua y el río Trapén? Un proyecto que, además, va en contrasentido de la meta actual de densificar la población de Puerto Montt en vez de diluirla. Y así empezó un diálogo público, anticipado por la milagrosa quema del bosque nativo en la zona Pocuro, justo semanas antes de que empezó su obra, seguido por la construcción de las primeras 750 casas encima de un cementerio de toneladas de salmones botados, poniendo en riesgo la salud y seguridad de los compradores de las casas. La primera fase de esta conversación publica los lectores del Diario El Llanquihue pueden ver en YouTube: https://www.youtube.com/watch?v=bJ2YG3-7WYw.
Más encima, Serviu - bajo la administración del Sr. Leonhardt - adelantó a Pocuro millones y millones de pesos de todos los chilenos a un proyecto que ni contaba con agua potable ni un sistema aprobado para las aguas servidas. Aquí huele algo mal, más que los salmones botados. Ya hemos recurrido a un sinfín de reuniones con las autoridades que - con la excepción de la orden de paralización de obras del alcalde Gervoy Paredes - no nos llevó a ninguna parte.
El problema más de fondo con Pocuro es que no obedece a los leyes chilenas, que exigen un estudio ambiental (no una declaración ambiental) por un proyecto de tal magnitud. En nuestra opinión, Pocuro evade las leyes por el fraccionamiento del proyecto, asegurándonos que se trata de un proyecto de solamente 750 casas (en su predio de ¡250 hectáres!), mientras que, a la vez, Pocuro contrata con la empresa San Isidro para agua potable y servicios de aguas servidas para ¡10.000 casas!
Ahora estamos en la segunda parte del diálogo público, o sea la conversación respecto del abastecimiento de agua potable y al manejo de aguas servidas por la empresa San Isidro, que pretende absorber las napas de toda nuestra comunidad con tres pozos profundos y también echar las aguas servidas de 10.000 casas - luego del "tratamiento" - al río Trapén, un río que sustenta a todo nuestro sector y que en los meses del verano se seca completamente.
Nos preguntamos: ¿Qué pasará cuando falle la planta de tratamiento y se llene el río con las fecas de 40.000 personas? ¿Quién garantiza que no habrá filtraciones a las napas subterráneas que afectarían directamente al Comité de Aguas Trapén, del cual depende el abastecimiento de agua de toda la comunidad borde costero, o unas 7.000 personas?
¿No sería aconsejable que la autoridades exijan a San Isidro un estudio ambiental por un proyecto potencialmente tan nefasto para el sector nuestro? Especialmente, dado la sequía actual y la amenaza del calentamiento global que recién estamos viviendo por toda la Región de Los Lagos?
Así que recién el 18 de julio, San Isidro, con el lobby de Sr. Mueller y un Sr. Claudio Gaete, lanzó su tercera declaración de impacto ambiental (las dos primeras fueran rechazadas).
Estos caballeros ya tienen que estar bastante desesperados, pues tenemos entendido que han prometido entregar sus casas a los compradores en noviembre, y si no solucionan rápidamente los temas de agua potable y aguas servidas, va a haber muchos problemas encima. Pues un representante de la empresa ya ha recorrido las juntas de vecinos de nuestro sector (los vendidos y los no vendidos) para explicarles lo bonito que es su proyecto. Y también para dividirnos.
Adelantamos, entonces, que los vecinos del borde costero Panitao, Ilque, Huelmo y Trapén ya estamos en alerta y que exigimos probidad por parte del intendente y todos los seremis de la región que les tocan revisar el proyecto de nuevo. Vamos a insistir que Pocuro y su hermano menor San Isidro cumplan con las leyes chilenos y armen los estudios ambientales que corresponden.
STEVE ANDERSON. Panitao Bajo.
Politización
La politización detectada en Gendarmería, y el Sename, etc., en tiempos en que se habla de probidad y transparencia, resulta muy peligrosa como para cualquier organismo e institución del Estado, porque ello atenta precisamente contra esos objetivos, debilitando la función transversal de lo público, generando los vicios que desacreditan al Estado y todo lo que de él emana. Quienes recordamos tiempos pasados tenemos muy claro el efecto de ello,;ya existe experiencia, no tropecemos con la misma piedra.
JOSÉ M. CAEROLS S.