Javier Andrade Cárdenas

Es conductor de limusinas en Boston y ha estado más cerca que cualquier chileno de tomarse una foto con los jugadores de la Selección Nacional.

Y es que Guillermo Arcos Ojeda ha sido un privilegiado y no le ha perdido pisada a la delegación de la Roja desde que llegó el martes a la capital del Estado de Massachusetts, para enfrentar este segundo lance del conjunto nacional correspondiente al Grupo D frente a Bolivia por la Copa América Centenario.

Este puertomontino de 44 años y de profesión administrador de empresas, ligado a la acuicultura, apenas supo que el equipo de Juan Antonio Pizzi jugaría en el Gillette Stadium, el corazón comenzó a palpitarle fuerte y a prepararse para presenciar este magno evento, que jamás soñó ver desde tan cerca.

TRATO CORDIAL

Desde Boston, Guillermo Arcos relató que ha estado muy cerca de la selección. "Horas después del sorteo compré las entradas con unos amigos y arrendamos una van para asistir al encuentro ante Bolivia", comenta.

El fanático puertomontino ha tenido la oportunidad de visitar el hotel donde se hospeda el equipo chileno. "El acceso al hotel Sheraton ha sido súper expedito y los seleccionados se han portado muy bien con los compatriotas que han llegado desde distintos puntos de Massachusetts para alentarlos. Para ello, aproveché de ingresar, tras haber dejado a un grupo de pasajeros y me pude tomar fotos con varios de los jugadores del plantel; todos ellos muy cordiales, a pesar del celo que mostraban los guardias que custodiaban el hotel de loa nacionales", aseveró el puertomontino.

VIDEO amateur

Pero no sólo ha sido testigo directo del arribo del equipo chileno y de la Marea Roja que la acompañará para el partido de hoy.

Y es que Guillermo Arcos ha mostrado también tener virtudes frente a las cámaras y elaboró un vídeo que mostró sus vivencias y sentimientos en la previa del desafío ante el elenco altiplánico y que subió a Facebook.

"La verdad es que me gusta mucho hacer vídeos, creo que es una linda forma de acercarme a mis amigos de Puerto Montt, y es obvio cometo errores, pero es una humorada para hacer sentir que esta copa que se ve tan lejana, se siente más cerca, por lo menos, para los que compartimos en las redes sociales. De esta manera, he comenzado a informar de una forma muy amateur lo que yo igual estoy viviendo desde este país que me ha abierto las puertas", señaló.

Sobre la seguridad, destacó que "acá no existen rejas en los estadios, no hay barras violentas, así que el que se porta mal se va detenida de una, por lo que nadie se arriesga", dice.