Líderes sociales critican "uso en exceso" de gases lacrimógenos
EN PROTESTAS. Responsabilizan al gobernador, Juan Carlos Gallardo, de utilización de químicos. Carabineros asegura que agua es inefectiva contra los manifestantes.
"Está bien coronel, pero trate de que sea sólo con agua". Esa fue parte de las instrucciones que el gobernador, Juan Carlos Gallardo, entregó vía telefónica al prefecto de Carabineros de Llanquihue, coronel Patricio Yáñez.
La autoridad del Ministerio del Interior contestó su celular a las 14.21 horas, mientras se desarrollaban incidentes en avenida Salvador Allende de Puerto Montt, sosteniendo un breve diálogo frente a los medios de comunicación.
Tras la multitudinaria marcha que culminó en la Plaza de Armas de Puerto Montt, un grupo de jóvenes se descolgó de la manifestación autorizada y se dirigió a bloquear la intersección de las avenidas Benavente y Salvador Allende. Allí eran esperados por un carro lanzagua y dos impopulares "zorrillos" lanza gases, además de efectivos de Fuerzas Especiales de Carabineros, vehículos que fueron atacados a pedradas por los manifestantes.
Al igual que en Las Quemas, Chamiza y el centro de la ciudad, los gases fueron el principal medio disuasivo utilizado por la policía, lo que ha generado críticas de dirigentes sociales de la zona.
Apuntan al gobernador
Andrea Araneda, presidenta de la federación de estudiantes de la UACh en Puerto Montt, sostuvo que "los recolectores de Chamiza, que bloquearon la Carretera Austral el jueves, fueron brutalmente reprimidos por Carabineros, usando lacrimógenas, aún cuando en el grupo había niños. Sabemos que actúan por instrucciones del Ministerio del Interior".
En la misma línea, José Pacheco, presidente provincial de la CUT, afirmó que "Carabineros se ha excedido en el uso de la fuerza represiva, especialmente en el uso de gases disuasivos en contra de gente desesperada que ha perdido su fuente laboral. Aquí se hay un uso exceso de lacrimógenas, y a nuestro juicio el responsable de esta situación el Ministerio del Interior, que a través de la Gobernación Provincial, entrega las instrucciones para el actuar de la policía frente a las manifestaciones sociales".
Consultado al respecto, el gobernador Gallardo sostuvo que la utilización de disuasivos químicos era responsabilidad de Carabineros.
"La institución tiene su propio protocolo de intervención cuando sucede este tipo de situaciones. Naturalmente lo que uno le solicita a Carabineros es que la fuerza utilizada sea proporcional al hecho que se quiere abordar", dijo Gallardo, agregando que la Gobernación no le indica a Carabineros el tipo de disuasivo a usar.
El material químico utilizado por Carabineros corresponde a granadas lacrimógenas de mano CS-3251 y a proyectiles lacrimógenos de 37 milímetros CS-3223, fabricadas por la empresa estadounidense Combined Tactical System (CTS), además del gas utilizado en el vehículo táctico. El agente irritante corresponde a clorobenzilideno malononitrilo, conocido como CS, que es un polvo sólido que es dispersado con un gas propelente.
El presidente del Colegio Médico, y experto en toxicología, Enrique Paris, indicó que el CS es reconocido por sus graves efectos en el sistema ocular, respiratorio y dérmico, los que aumentan en personas de mayor sensibilidad.
"En muchos pacientes desencadena un síndrome bronquial obstructivo, especialmente en pacientes asmáticos y con enfermedad bronquial crónica. Las convenciones de derechos del niño prohíben su uso en presencia de menores, ya que en caso de niños pequeños pueden generar quemaduras en las mucosas y vías respiratorias", explicó.
Respecto a su uso, el prefecto de Carabineros de Llanquihue, coronel Patricio Yáñez, indicó que "no hemos cuantificado la totalidad gas que se ha tenido que utilizar, ante la inefectividad que ha tenido la dispersión con agua".