50 familias desplazadas por erupción del Calbuco no han recibido los bonos
DOS MESES. Adeudan arriendos y las respuestas no han sido claras.
Son alrededor de 50 familias de las localidades de Río Blanco y Lago Chapo, que están viviendo en Puerto Montt, las que no han recibido el bono de arriendo hace dos meses.
Se trata de las familias desplazadas por la erupción del Volcán Calbuco, emergencia que está por cumplir un año.
Los grupos familiares afectados por esta situación, tras la erupción del 22 de abril de 2015, debieron dejar sus hogares en las faldas del macizo, por el riesgo que sean afectados por lahares.
La situación es compleja, porque tras dejar sus propiedades, la producción es mínima, y han debido sobrevivir realizando algunos trabajos esporádicos. Hasta el momento, se les adeudan los meses de enero y febrero por el concepto de bono de arriendo.
"Nos adeudan el bono de arriendo o acogida del mes de enero y febrero, y vamos para marzo, y no hay ninguna posibilidad. Son varios los vecinos de Río Blanco que están con el mismo problema", relató Nancy Belmar, quien no ha podido retornar a su domicilio.
Iris Jaramillo, del sector de Río Blanco, dijo que junto a su familia estaban de allegados. "Nos arreglamos entregando lo que podemos, pero se sabe que quienes están más complicados son los que están arrendando", dijo.
Para Iris, el problema es que las autoridades dicen distintas cosas, pero les prohíben retornar a sus hogares. "Nos hacen esperar demasiado y no entregan ninguna respuesta, pese que al principio cuando ocurrió la erupción nos prometieron muchas cosas; y así como está todo, parece que se burlaran de la gente", añadió.
Juan Barría, presidente de la junta de vecinos de Río Blanco, dijo que en la Intendencia le han dicho que los presupuestos están aprobados para estos pagos. "Hemos realizado las gestiones con las autoridades, para que se regularice esta situación, por lo que esperamos una pronta respuesta", dijo. Para el dirigente es necesario reactivar la mesa de diálogo, para tener más claridad respecto al futuro de los vecinos.