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Cuando fumar ya deja de ser un placer y se convierte en amenaza

PREVENCIÓN. A partir de mayo comenzarán a aparecer nuevas imágenes en los envases de cigarrillos, que estarán expuestas por los próximos dos años. Esta vez el público objetivo son los adolescentes y embarazadas. Al día, mueren 45 personas en el país, producto de las enfermedades derivadas del tabaquismo.
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Carlos Bohle es un sonidista, que trabaja en un local nocturno en el centro de Puerto Montt. Y durante cada fin de semana, fuma unas tres cajetillas de cigarrillos; es decir, unas 60 unidades, entre las noches de viernes y sábado.

Hace 20 años que se inició en el hábito, cuando estudiaba y tras las clases compraba en un quiosco que vendía cigarros sueltos. Hoy, a sus 33 años, siente que debe abandonar ese "vicio", porque no quiere ver resentida su salud. Ya experimenta síntomas, como sequedad bucal y de garganta.

Está decidido a abandonarlo, porque no quiere pasar a ser parte de las 45 personas que todos los días mueren en el país, como consecuencia del tabaquismo.

A través de los años, el Ministerio de Salud (Minsal) ha implementado campañas destinadas a disminuir estas nefastas estadísticas. Una de ellas es la que establece el artículo 6° de la Ley 19.419, destinada a que "todo envase de los productos del tabaco (...) deberá contener una clara y precisa advertencia de los daños, enfermedades o efectos que, para la salud de las personas, implica su consumo o exposición al humo del tabaco".

Es por ello que han incorporado imágenes de advertencia, con el propósito de hacer conciencia entre los consumidores, del daño que se autoprovocan y las consecuencias futuras a las que se exponen.

Esta vez, el público objetivo del Minsal estará en los adolescentes y embarazadas.

Inicio precoz

Con datos en la mano, la seremi de Salud, Eugenia Schnake, precisó que la edad promedio de inicio del consumo de tabaco es de 13 años, quienes se van haciendo más fumadores conforme pasa el tiempo. Así, el consumo de octavo básico casi se cuadriplica cuando llegan a cuarto medio.

"Estas imágenes en las cajetillas de cigarrillos tienen por objetivo que disminuya el inicio de este hábito en los jóvenes, que parten muy tempranamente, a los 13 años, de acuerdo a los estudios del Senda, que es el mismo panorama que ocurre en la región", sostuvo la seremi Schnake.

Mientras que la directora regional del Injuv, Yanina Vargas, atribuyó este comienzo temprano a una condición natural de los más jóvenes, en cuanto a "probar cosas nuevas", a lo que sumó la influencia del ambiente social. "Si los amigos fuman, es probable que el o la joven lo comiencen a hacer. En eso tiene que ver el sentido de masividad: si uno lo hace, todos los repiten".

Recomendó a privilegiar la autenticidad. "Por mejor que sean las relaciones con nuestros pares, no nos tienen que obligar a repetir sus modelos", manifestó.

Llamó a que al interior de las familias se hable de este tema, ya que "es mucho menor el riesgo de que caigan en esa conducta. Una conversación franca con los hijos siempre va a ayudar a evitar este tipo de hábitos, que van a permanecer por el resto de la vida. A esa todavía se está en etapa de formación", estableció.

La seremi de Salud también instó a los padres a que no fumen frente a sus hijos, así como no hacerlo en lugares cerrados, para disminuir también el efecto sobre el "fumador pasivo".

Yanina Vargas estableció que al prevenir el consumo adolescente de tabaco, "probablemente vamos a tener menos adultos fumando".

Aumenta en mujeres

Datos de la Encuesta Nacional de Salud (ENS) 2010, establecen que la prevalencia de tabaquismo en de un 40,6 % en la población general, de los 15 a los 65 años y más.

Sin embargo, la seremi Schnake apunta que aunque la tendencia indica que hay cierto descenso en esos indicadores, en el caso de las mujeres ese comportamiento va al alza.

Estudios del Senda establecen que se pasó de un 20,1 % en 2012, a un 22,2 % en 2014, lo que iguala la prevalencia entre hombres.

Agregó que "en las embarazadas, hay estudios que señalan que un 28 % de ellas siguen fumando durante ese periodo. Por lo que cuando tengan a su hijo o hija, van a seguir con el hábito del tabaquismo".

Advirtió que hay riesgos para la salud del embrión y del feto, así como para los recién nacidos. "Se pueden producir pérdidas de embarazo por este hábito, un menor desarrollo fetal, riesgo de partos prematuros, niños que después tengan enfermedades respiratorias agudas y crónicas y una disminución en general del desarrollo", afirmó la seremi Schnake.

Paula Barría trabaja en una entidad bancaria del centro. Tiene planes de formalizar un noviazgo y para ello, el embarazo está en sus planes.

Admitió que fuma diez cigarrillos diarios, pero "el día que sepa que estoy embarazada, dejo de fumar. Pero ahora sigo fumando. Lo ideal sería no hacerlo, pero igual cuesta. Puede uno disminuir la cantidad, pero quitarlo de un día para otro, es bastante complicado. Lo he intentado, pero es difícil", reconoció.

Sobre las nuevas imágenes y el mensaje a jóvenes y embarazadas, opinó que no tendrán mayor efecto, porque "el que fuma, fuma igual. A pesar de la imagen, a pesar del costo. Ahora, con el impuesto al tabaco, me sale carísimo una cajetilla ($3.200), pero uno sigue comprando".

Luis Gallardo, propietario del quiosco de Urmeneta con O'Higgins, frente a la Plaza de Armas, coincide con Paula barría. "Por más que le coloquen advertencias, la gente igual se las busca. Algunos tapan estos mensajes con un papel y listo".

Dijo no temer un impacto en las ventas. "Si no han bajado por los precios, que siguen subiendo, esto no va a producir ningún efecto en el fumador".

Afirmó que la cajetilla de cigarrillos más cara cuesta $3.700 y el más barato lo vende en $ 2.400. "Esto es lo mismo que las restricciones para fumar en algún lugar. La gente busca otro y fuma igual", aseguró el comerciante.

Mensaje de la campaña

La directora regional del Injuv valoró esta campaña, que comienza a hacerse efectiva a contar de mayo y que se extenderá durante los próximos 24 meses. "Tiene un mensaje súper claro. Con ello generamos un impacto en los jóvenes y los motivamos a buscar información, además de asumir que es un riesgo para nuestra vida, que se genera al momento de comenzar a fumar", resaltó Yanina Vargas.

Mientras que la seremi de Salud, Eugenia Schnake, resaltó los mensajes de esta advertencia sanitaria.

En el caso de los más jóvenes, dijo que "una imagen es muy clara en cuanto a que el tabaco produce adicción y otra que señala que los cigarrillos son veneno. Porque aparte del tabaco, hay una serie de otras sustancias que agregan y que producen mayor adicción y menor percepción del riesgo, con sustancias agradables como olores y sabores que hacen que se empiece a fumar a más temprana edad o que las mujeres lo sientan más agradable".

Se espera obtener buenos resultados, luego que un estudio de Senda de 2013, reflejó que un 85,8 % de estudiantes de 8° básico a 4° medio, calificaron ese hábito como "riesgo grande".

En el caso del mensaje a las embarazadas, la seremi Schnake resaltó el caso de "un embarazo y abdomen, en un ambiente de humo; y otro es un niño prematuro, cerca de una nube de humo de cigarrillo".

De acuerdo al Décimo Estudio de Drogas en Población Escolar Senda en la Región de Los Lagos la prevalencia diaria de tabaco muestra una variación (no significativa) respecto del último estudio, pasando de 7,8 % en 2011 a 7,9% en 2013.

Este es el segundo resultado más bajo de toda la serie, a pesar de lo anterior ubica a la región por sobre el promedio nacional, que es un 7,3%.

40,1 % es la prevalencia de fumadores en la Región de Los Lagos, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud (ENS) 2009-2010, del Ministerio de Salud.

7.9 % es el promedio de cigarrillos que un fumador de la región consume todos los días. Mientras que la prevalencia de un fumador pasivo laboral, alcanza a un 6,8 %.

29,9 % resultó ser la prevalencia regional de la dependencia del tabaco, entre los 18 a 44 años. En los escolares, es de 6,6 % entre octavo básico y primero medio; y de 9,1 %, de segundo a cuarto medio.