Expertos advierten que hay alimentos saludables que no son sostenibles y que pueden afectar el medio ambiente
Aumentar el consumo de pescado y suprimir el exceso de carnes rojas es un buen comienzo para desintoxicar el organismo y obtener los nutrientes necesarios para mejorar la salud cardiovascular y la memoria, entre otros beneficios.
Sin embargo, investigadores de la Oficina de Prevención de Enfermedades y Promoción de la Salud (ODPHP, en inglés), perteneciente al Gobierno de los Estados Unidos, advierten que la ingesta de este y otros alimentos saludables no es sostenible en el tiempo, es decir, producen tal impacto que su producción puede disminuir notablemente.
En ese sentido, hay diferencias de opinión entre los promotores de dietas saludables -que sugieren pautas de alimentación saludable a nivel mundial- y los defensores de la sostenibilidad.
En el campo de la ecología, un producto es sostenible en el tiempo cuando puede mantenerse por sí mismo gracias a las condiciones económicas, sociales o ambientales.
Quienes defienden esta materia dicen que es fundamiental investigar más a fondo los alimentos saludables y su impacto en el medio ambiente cuando se estimula su consumo, tal como ocurre con el pescado en la dieta mediterránea.
Kathleen Merrigan, directora ejecutiva del Instituto de Sostenibilidad de la Universidad George Washington, señaló que si bien las personas deben consumir estos alimentos para mantener una buena salud, también hay que velar por la "tierra sin cultivar" del planeta.
"Puede que no tengamos todas las respuestas, pero sin duda se sabe que es mejor plantear las preguntas", sostuvo la experta, citada por la revista Time.
Pero los alimentos saludables no son los únicos que podrían provocar este impacto en el medio ambiente. Según los investigadores, la carne es uno de los productos más insostenibles, ya que dejan una huella de carbono enorme teniendo en cuenta los recursos necesarios (agua, tierra, alimentos y fertilizantes, entre otros). Por ejemplo, un kilo de carne de res libera 27 kilogramos de dióxido de carbono a la atmósfera.
27 kilos de dióxido de carbono libera la producción de un kilo de carne, que equivale a la emisión de un auto en 38 kilómetros.