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Terremoto: Gobierno decreta estado de excepción en Coquimbo

UN DÍA DESPUÉS DE LA TRAGEDIA. La Presidenta Bachelet recorrió algunos de los sectores más afectados por el terremoto, como Tongoy. Cifra de muertos, al cierre de esta edición, se elevó a 11.
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Redacción

El Gobierno elevó ayer a al menos 11 la cifra de personas fallecidas tras el terremoto de magnitud 8,4 que sacudió el miércoles a la zona centro-norte del país, mientras se normalizaban las actividades en las regiones más golpeadas por el sismo.

El Ejecutivo decidió decretar estado de excepción constitucional de catástrofe en la Región de Coquimbo, producto de que ayer se mantenían 70 mil hogares sin energía eléctrica y por razones de seguridad.

Según la información que entregó el Ministerio del Interior, al mando de la zona quedó el general de Brigada Schafik Nazal Lázaro, comandante en jefe de la II División Motorizada.

La denominación implica que los derechos y garantías que la Constitución asegura pueden ser afectados suspendiéndose o restringiéndose en su ejercicio, siempre y cuando concurra alguna causal que lo justifique y se declare por parte de las autoridades que la Constitución señala.

La Onemi elevó la cifra de muertos al menos a 11 al cierre de esta edición. El ministro del Interior, Jorge Burgos, había detallado antes que algunos murieron aplastados por el derrumbe de murallas y otros por ataques cardíacos.

Un informe de la Onemi reveló además que más de 600 personas se encuentran refugiadas en albergues y unas 180 viviendas quedaron destruidas por el terremoto, que fue seguido de un pequeño tsunami.

La zona más afectada es la de Coquimbo y su puerto, donde las olas, que alcanzaron entre los cuatro y cinco metros de altura, sobrepasaron las barreras de contención y el agua alcanzó viviendas y locales comerciales.

La fuerza del agua incluso arrastró algunas embarcaciones hasta arterias céntricas de la ciudad. Un similar panorama vivían balnearios como Tongoy, Los Vilos y Totoralillo, entre otras.

"rápida respuesta"

La Presidenta Michelle Bachelet, que ayer llegó a la Región de Coquimbo para verificar los estragos del desastre, afirmó que los servicios básicos en la zona se están reponiendo, y destacó que la rápida respuesta ante la emergencia permitió que "todo funcionara adecuadamente".

"Sabemos el dolor que se produce y muchas veces la rabia también, por eso estamos trabajando lo más rápido posible", afirmó la Mandataria, que pidió paciencia a los afectados.

La Jefa de Estado destacó que "acá yo creo que se ha demostrado varias cosas: primero, que la institucionalidad ha ido mejorando, que ha habido una respuesta rápida; que los vecinos respondieron de manera extraordinaria, porque cooperaron y evacuaron".

Según la Mandataria, "si no hubiéramos evacuado, al ver cómo están las casas, probablemente tendríamos muchas más muertes que lamentar (…) creo que ha habido una capacidad de respuesta rápida, que es lo que se requiere ante los desastres: una gran capacidad de la población de responder adecuadamente".

A viva voz, la Jefa de Estado se paró en un improvisado escenario en Tongoy para dialogar con nerviosos dirigentes comerciales y pescadores.

"Estamos aquí porque sabemos el tremendo daño que han vivido y hemos escuchado a muchos vecinos, espero que comprendan que es difícil ir negocio por negocio y tenemos que ir a todos los lugares".

La conectividad

El director de la Onemi, Ricardo Toro, informó que la Ruta 5 Norte, que une Santiago con el norte del país, "está operativa", aunque con tránsito "con precaución".

"Cuando aún no han transcurrido 24 horas de este terremoto de gran magnitud, podemos informar que la Ruta 5 y los centros urbanos tienen conectividad y eso es un gran avance, porque nos permite llegar con la ayuda a las ciudades afectadas", afirmó el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga.

Según el Centro de Sismológico Nacional de la Universidad de Chile, desde el terremoto se han originado más de 100 réplicas, varias por encima de los 6 grados. Las más intensas fueron inmediatamente después del terremoto, con 7,6 y 7,1 en la escala de Richter.

Limpieza

Los habitantes de Canela Baja, epicentro del terremoto de 8,4° Richter del miércoles, comenzaron ayer a verificar el estado en que quedaron sus viviendas. Las labores comenzaron a poco más de 15 horas del sismo y en medio de intensas réplicas.

"Esto no ha parado en toda la noche", relató a Emol Josué Vegas Pereira, cuya casa quedó con serios daños a raíz del fuerte movimiento telúrico.

"Dicen que fueron tres minutos, pero parece que fue de como una hora, porque no paraba" el sismo, afirmó el canelino. "Con mi familia teníamos que sujetarnos, porque si no nos caíamos", agregó, al momento que se percibía otra réplica.

La vivienda de Josué, que es de adobe, presenta varias y profundas grietas. Incluso una de sus paredes cayó sobre el techo de la casa de su vecina.

El alcalde de la comuna, Bernardo Leyton, reveló al citado medio que hay 37 personas albergadas en el sector de Huentelauquén y que los 10 mil habitantes de la comuna están sin luz.

Leyton pidió al Gobierno que les ayude con el envío de carpas y el despeje de las rutas que aún están interrumpidas por los desprendimientos de rocas.

"Se está haciendo un catastro aún y hasta ahora sólo tenemos agua potable. Vamos a habilitar otro albergue en el colegio de Canela Baja y vamos a entregar carpas a las personas afectadas", anunció.

En Illapel, otra de las comunas más afectadas por el terremoto, los habitantes constataron importantes daños en el cementerio municipal. Según imágenes difundidas por TVN, muchas tumbas sufrieron destrozos, algunas cruces cayeron al suelo y se desplomó una pared de 20 metros de largo. En algunos casos se ven incluso los cajones.

"Es muy grande el daño que dejó el terremoto. Tenemos más de 300 tumbas dañadas, hay algunas derrumbadas, vidrios y murallas rotas. Se cayó la muralla que dejó al descubierto el cementerio", dijo el administrador del recinto, Ramón Leyton.

A la comuna llegaron los ministros de Obras Públicas, Alberto Undurraga, y de Vivienda, Paulina Saball, para evaluar los daños en la infraestructura.

"La conectividad se ve funcionando. Sin embargo, los daños hay que ir evaluándolos", dijo Saball tras sobrevolar Illapel y Salamanca. La autoridad instó a las personas a tener precaución por posibles derrumbes. "Tenemos daños en los muros de contención. Llamamos a las personas a que tengan cuidado", enfatizó.

Parlamentarios

Parlamentarios de la Región de Coquimbo coincidieron ayer, al visitar las zonas afectadas, que los efectos más graves del terremoto los han sufrido las caletas de pescadores, las viviendas y los caminos.

La senadora Adriana Muñoz (PPD) comentó a Emol que se han rescatado varios botes que se habían llevado las marejadas hacia altamar, y que ayer se estaba realizando un registro de las embarcaciones afectadas. "Pero también hay en otras caletas del litoral mucha pérdida, entiendo que hay unas dos o tres que han desparecido en la región", aseveró la legisladora.

En ese sentido, la parlamentaria dijo que "el llamado que yo haría es que los recursos que se van a destinar por zona de catástrofe que se ha destinado en toda la provincia del Choapa y en Coquimbo lleguen sin burocracia".

"Aquí se requiere mucho material de construcción de vivienda y eso muchas veces demora en llegar. Se requiere con prontitud que las autoridades destinen recursos que no pasen por una malla burocrática que de repente llegan en dos o tres meses más, se necesita la ayuda hoy", agregó.

Muñoz señaló que también se requiere ropa y alimentos.

El diputado Miguel Alvarado (PPD) reportó daños en algunas rutas, como la 5 Norte, debido a deslizamientos de tierra.

"He estado prácticamente aislado y el daño en la región es significativo del punto de vista material. Se ve mucho daño en las caletas, en Tongoy, y ahora vamos a tener que irnos por fuera, porque la ruta de Canela, Illapel y Combarbalá está cortada por derrumbe", comentó el político al citado medio digital.

Para Alvarado, "lo más urgente es habilitar rápidamente los albergues, hay zonas en que hay dificultad del agua potable y tenemos que ver cómo se va a dando la situación, porque el tema de alimentación también requiere los recursos necesarios".

Finalmente, el diputado Sergio Gahona (UDI) indicó que aunque la población pudo "enfrentar adecuadamente la evacuación, sobre todo en La Serena y Coquimbo, el gran daño es producto del tsunami. En este momento estoy en la 'zona cero', en el lugar en donde está la Teletón, que está completamente destruido. Todo el borde costero de Coquimbo destruido, la caleta de pescadores, las viviendas del barrio Baquedano, el centro de Coquimbo", dijo. Según el legislador, lo primero que se espera es "el restablecimiento a la brevedad de energía eléctrica en los sectores devastados y por supuesto el agua potable".

Pescadores afectados en Los Vilos

En Los Vilos, comuna costera de la Región de Coquimbo, la mitad de los pescadores resultó afectado por el sismo, según la dirigenta Carolina Collao. "Hay varios botes dañados, hay casas con daños en el borde costero", comentó Collao en Cooperativa. Una percepción similar manifestó el alcalde de la ciudad, Manuel Marcarian, quien indicó que los más afectados son los pescadores y las personas que viven cerca del borde costero, pues esas casas resultaron destruidas. Imágenes de televisión mostraron viviendas y locales comerciales anegados en la Costanera Salvador Allende.

100 réplicas Más de un centenar de sismos se han percibido en la zona cercana al epicentro de la tragedia, varios de ellos con magnitudes superiores a los 6 y 7 grados Richter.

600 personas Están en albergues, según el último informe emanado por la Oficina Nacional de Emergencia. Unas 180 casas registran diferentes niveles de destrucción.

4 y 5 metros de altura Fue lo alcanzado por el mar en algunas zonas, como consecuencia del maremoto consecuencia del megasismo grado 8,4 en la zona norte del país.