Agónico empate de Puerto Montt premia el esfuerzo en su reestreno en la Primera B
debut. El héroe del partido, jugado ante San Felipe, fue Diego Alvarado, quien se reivindicó tras errar un penal, al convertir el 1-1 al minuto 91 del encuentro. Arranque de oro de los Delfines.
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Un positivo arranque por donde se le mire, fue el que obtuvo Deportes Puerto Montt en su regreso a la Primera B.
Y es que el cuadro albiverde rescató un heroico empate 1-1 frente a San Felipe, gracias al tanto convertido por el atacante Diego Alvarado a los 91 minutos, el mismo que había malogrado un lanzamiento penal, que había tapado el arquero Luis Assef.
El cuadro albiverde, que comenzó cayendo con el equipo del Aconcagua, tras la anotación convertida en el primer tiempo por Francisco Ayala a los 36', mantuvo a raya a su rival y en la etapa de complemento hizo méritos suficientes para conseguir la igualdad, frente al cuadro que terminó segundo en la categoría al concluir la temporada pasada.
Una igualdad más que justa del cuadro puertomontino, que fue acompañado por una pequeña barra que no dejó de alentar al equipo que desde hace tres semanas había comenzado su participación en la Copa Chile.
En la primera fracción, el elenco visitante fue dominador por el local y Puerto Montt generaba peligro gracias al esfuerzo que ponía Marcelo Aguilar en delantera y Jefferson Castillo en el medio juego.
En defensa, destacaba la eficiencia de Wladimir Herrera, para detener los avances de un rival que jamás pudo sentar supremacía sobre el conjunto sureño.
Los últimos 15 minutos fueron los más claros para el local, que pudo lograr la primera anotación, a través de su delantero Francisco Ayala, e incluso el cuadro sanfelipeño casi consigue el segundo gol para irse al descanso con una ventaja más amplia.
LLEGADA
En la etapa de complemento, Puerto Montt logró reaccionar y el ingreso de Francisco Román en el ataque en reemplazo del juvenil Aguilar, le dio un nuevo aire al cuadro albiverde, que se fue tempranamente en busca del empate.
La figura del dueño de casa, Miguel Ángel González, el "Mágico", comenzó a esfumarse en el mediocampo, lo que aprovechó el cuadro de Erwin Durán para abrirse con llegadas claras y de peligro comandadas por la dupla de Román y Alvarado.
Y fue este último, que protagonizó dos de las jugadas más importantes del encuentro. A los 81 minutos, desperdicia un lanzamiento penal que tapó el arquero Luis Assef, pero que se reivindica ante la parcialidad cuando, con un cabezazo, que le gana a todos los defensores, convierte el gol que dio la alegría en las postrimerías del cotejo y que fue celebrado como un triunfo en un reducto donde siempre ha costado vencer.