Secciones

robot philae despierta tras siete meses inactivo sobre un cometa

espacio. La sonda Rosetta recibió las primeras señales del dispositivo, que logró sobrevivir a las condiciones adversas del cuerpo celeste.

E-mail Compartir

Los investigadores e ingenieros de la misión Rosetta esperaron durante siete meses para que el módulo Philae, posado en el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko, despertara de su letargo.

La sonda Rosetta de la Agencia Espacial Europea (ESA) recibió la noche del sábado una corta señal de unos 85 segundos procedente de Philae, lo que indicaría que sus baterías se reactivaron y que el aparato logró resistir las condiciones climáticas y ambientales.

"El minilaboratorio se conectó el sábado a las 22.28 horas y envió los primeros 300 de más de 8.000 paquetes de datos a la Tierra", explicó una portavoz del Centro Aeroespacial Alemán (DLR) en Colonia.

Rosetta supuso un hito en la carrera espacial al conseguir el 12 de noviembre de 2014 que su módulo Philae aterrizara en la superficie de un cometa, lo que ocurrió por primera vez en la historia.

Este éxito se completa ahora con el despertar de Philae, que después de posarse en el cometa 67P logró estar operativo durante casi 57 horas y enviar algunos datos a Tierra.

Sin embargo, como quedó en una zona oscura del cuerpo celeste, no pudo recargar sus baterías solares y entró en estado de hibernación.

A medida que el cometa se fue acercando al Sol, las posibilidades de que Philae se despertara iban en aumento.

Eso es lo que consiguió ahora al alcanzar los vatios y temperatura suficientes para ello.

el recorrido

Pero antes de esta noticia, la misión Rosetta, a la que pertenece Philae, tuvo que realizar un largo viaje.

Lanzada el 2 de marzo de 2004 desde la base europea en Kurú (Guyana Francesa), la sonda Rosetta debe su nombre a la piedra que permitió descifrar el lenguaje jeroglífico de los egipcios.

Su misión era viajar a la órbita del cometa 67/P Churyumov-Gerasimenko con el objetivo de conocer los orígenes del Sistema Solar y las claves de la aparición de la vida en la Tierra, ya que los cometas contienen los elementos más antiguos del Universo.

Tras pasar por los asteroides Luichewoo, Steins y Lutetia, en 2005 tomó la primera imagen del cometa Tempel 1 y en su largo viaje pasó en tres ocasiones (2005, 2007 y 2009) cerca de la Tierra para aprovechar su fuerza de gravedad y en una ocasión (2007) recibió impulso de Marte.

El 8 de junio de 2011 la sonda Rosetta, seguida desde el centro de Control de Operaciones de la ESA en Darmstadt (oeste de Alemania), recibió la orden de entrar también en modo de hibernación, el "tramo más solitario", según la agencia espacial, y siguió su largo periplo con todos los sistemas apagados para limitar el consumo de energía.

Tras permanecer 957 días dormida, el 20 de enero de 2014 envió a la Tierra la señal de su "despertar" desde el espacio profundo.

En mayo comenzó la aproximación al cometa y el 6 de agosto se produjo el encuentro. En ese momento, la sonda de la ESA, que había recorrido más de 6.000 millones de kilómetros, estaba a una distancia de unos 100 kilómetros del cometa y viajaba a una velocidad de 775 metros por segundo.

La revista Science eligió la misión como logro científico de 2014 y en estos meses se han ido publicando y descubriendo datos, como que el cometa 67P no tiene campo magnético propio.

El 12 de noviembre de 2014, tras desengancharse de Rosetta, siete horas de vuelo y dos rebotes, le tocó el protagonismo a Philae: aterrizó en la superficie del cometa y envió la señal de que estaba "vivo"; días después entró en hibernación y la noche del sábado volvió a "despertar".

Philae mide 1,3 x 1,5 metros si se despliega, pesa unos 100 kilogramos y porta un taladro para sacar muestras directas.

El cometa 67P lleva los apellidos de sus descubridores: el científico ucraniano-soviético Klim Ivanovich Churyumov, quien estudió las fotografías de Svetlana Ivanovna Gerasimenko, una colega de la misma nacionalidad. En 1969, Churyumov concluyó que el objeto que aparecía en las placas de Gerasimenko era nuevo. Su investigación comenzó recién en 2003 a través del telescopio espacial Hubble, investigación previa al lanzamiento de la misión Rosetta.

300

paquetes de

datos logró enviar el módulo Philae a la sonda Rosetta después de siete meses de hibernación sobre el cometa 67P.

2004

fue lanzada

la sonda Rosetta desde la base europea en Kurú, Guyana Francesa. Pesa tres toneladas.

Utilizan células madre extraídas del tejido adiposo para tratamientos estéticos y de rejuvenecimiento

E-mail Compartir

Como una alternativa a los tratamientos cosméticos tradicionales, centros especializados están ofreciendo en Chile el uso de células madre como fuente de rejuvenecimiento, tanto para fines estéticos como para tratar enfermedades.

Según explicó el doctor Alejandro Guiloff, hematólogo y director médico del banco de células madre VidaCel, las células utilizadas para tratamientos estéticos son las llamadas mesenquimáticas o mesenquimales, cuya característica principal es su capacidad de regeneración.

Éstas se obtienen principalmente del tejido adiposo, por lo que es posible aprovechar la grasa que se desecha -por ejemplo, tras una liposucción- para extraer y criopreservar células madre.

"Estos tratamientos han demostrado ser muy efectivos porque no sólo sirven para rejuvenecer la piel del rostro, sino también ayudan a reponer el volumen y la forma que se han perdido en ciertas zonas del cuerpo con el paso del tiempo, como mamas, glúteos, manos, pantorrillas, entre otras", sostuvo Guiloff.

Rellenar arrugas y tratar heridas o quemaduras se encuentran entre los usos que se les puede dar a estas células, según explicó el médico.

De acuerdo con el profesional, la superficie del abdomen es la parte más sencilla para extraer grasa rica en células madre.

La ventaja de este método respecto de otras intervenciones estéticas, señaló Guiloff, es que es una opción menos invasiva. "Las células madre, en este caso, estimulan la regeneración del tejido, disminuyen la inflamación y favorecen la incorporación del implante de grasa en la zona, evitando que éste se reabsorba o se mueva", aseveró.

El médico recalcó que es importante guardar este material biológico cuando se es joven, ya que las células están más sanas y menos expuestas a agentes químicos como fármacos o elementos nocivos como el cigarrillo.

"Como requisito, lo único que mencionaría es que se trate de una persona sana, ya que nuestras células madre pierden calidad o envejecen, en la misma medida que nosotros lo hacemos. Una buena recomendación es criopreservar nuestras células madre cuando aún somos jóvenes. De esta manera, las tendremos disponibles en su máximo nivel de calidad y efectividad cuando realmente las necesitemos", indicó.

En opinión del especialista, cualquier persona puede someterse a este tratamiento. Sin embargo, dijo, "por sus características, este tipo de tratamiento es ideal para personas que buscan verse más jóvenes de manera natural, sin realizar grandes cambios en sus facciones".