Secciones

Banda local "Los Aguja" cerró el Festival Abril Cuecas Mil en San Bernardo

E-mail Compartir

miguelnegrono@gmail.com

Una maratónica y exitosa jornada tuvo uno de nuestros exponentes locales del baile nacional en lo que es uno de los principales escenarios de la cueca en nuestro país el pasado sábado 25 y domingo 26 de abril.

En el festival Abril Cuecas Mil, el cual está centrado en cultivar el folclore nacional, es posible encontrar exponentes que cultivan la cueca centrinas, cueca campesina, nortina, chilota, etc.

La historia es así.

A fines de febrero se abrieron las postulaciones para participar en la vigésima cuarta versión del festival.

La banda postuló y finalmente fueron seleccionados para participar.

Tras conocer esa información comenzaron a preparar un show que se caracterizara por lo variado y novedoso.

En total, ensayaron 15 cuecas, la mayoría creaciones musicales del líder de Los Aguja, Adrián Ojeda, repertorio que contempló particularmente la cueca centrina y la cueca chilota. Importante para este desafío fue un proyecto Ventanilla Abierta, el cual les permitió costear los costos de pasajes y traslados.

De madrugada

Con la gran cantidad de exponentes presentes, Los Aguja se subieron a los escenarios del Abril Cuecas Mil cerca de las 5 de la madrugada del día domingo. A pesar del horario, tras su presentación se acercó a la agrupación Claudio Andia, presidente de la Agrupación de Folclore de San Bernardo, quien los felicitó y les solicitó se subieran nuevamente a tocar a las 8 de esa misma mañana, a lo cual Los Aguja accedieron.

Como si fuera poco, el propio Andia les informó que la evaluación obtenida tras la primera presentación había sido la más alta, lo que les permitió obtener una nota 7,0 entre más de 100 agrupaciones presentes provenientes de todo el territorio nacional, lo que los dejaba con serias posibilidades de cerrar la vigésima cuarta versión del Abril Cuecas Mil.

Horas después de terminar su segunda presentación se les confirma que serán quienes cierren el certamen, lo que además les significa abrir la versión número 25, a realizarse el próximo año.

Sin embargo, surgió un pequeño problema: a la hora en que estaba fijado el cierre del festival, Los Aguja debían abordar un bus de vuelta a Puerto Montt.

Sin embargo esto se solucionó rápidamente y a las 22 horas de ese domingo estaban por tercera vez en el día arriba del escenario.

Cierre

Así es como interpretaron las 10 últimas cuecas del festival, cerrando con "Instrucciones prácticas, básicas y elementales de cómo preparar un terremoto en 18 sencillos versos", momento en que la cantidad de público bailando llegó a las 5 mil almas. Esa era la cueca número mil.

Tras ellos y ya cerca de las 23 horas abordaron el bus que los traería de vuelta a la zona. "Para nosotros fue una experiencia tremendamente importante, ya que nos sirve para proyectarnos y mostrar a otro público nuestro trabajo musical", explica el guitarrista de Los Aguja, Felipe Muñoz.

Luego de esta participación están trabajando en una nueva agenda y lo primero que está en mente es un re-lanzamiento de su primer trabajo musical el presente año en Puerto Montt, cuyo título es "Hijo del Sur", trabajo que -no está de más decirlo- puede ser descargado de forma gratuita desde la página de Portal Disc (www.portaldisc.com).

Así es como Los Aguja lograron dejar el nombre de nuestro sur en la cúspide del folclore chileno, hazaña que los tendrá arriba de los mismos escenarios el próximo año cuando se celebre la vigésimo quinta versión de este legendario festival.

"Chiloé del ayer", una nostálgica mirada a la isla desde el pasado

E-mail Compartir

miguelnegrono@gmail.com

Este fin de semana, específicamente el domingo 3 de mayo, cierra la exposición de la artista Silvia Rivera titulada "Chiloé del ayer", la cual se encuentra abierta desde el pasado 8 de abril en la Sala Multiuso de la Casa del Arte Diego Rivera de Puerto Montt.

Se trata de una muestra que contiene un total de 9 obras hechas en óleo, las que -tal como el título de la muestra sugiere-, hablan sobre la particular cultura chilota.

En este trabajo podemos encontrar imágenes de habitantes desarrollando su vida cotidiana a orillas del mar que baña las costas chilotas, dejando una embarcación o haciendo intercambios comerciales por productos marinos. De fondo, la naturaleza que caracteriza la zona se muestra en su esplendor.

Otras obras más nostálgicas representan la vida local con el desaparecido ferrocarril -dañado irremediablemente tras el terremoto de 1960-, el cual conectaba hasta hace algunos años diversos puntos de la isla entre Ancud y Castro. Se superponen casas y palafitos con sus inolvidables tejuelas, elementos que también han ido retirándose con el paso del tiempo.

El intercambio comercial y el espacio privilegiado en que estos se desarrollan -las ferias y puestos callejeros-, también están presentes en esta muestra. Imagen recurrente de postales, representa a la familia y sus componentes de menor edad como una generación que hereda las actividades que sus progenitores realizan y, consecuentemente, en muchos casos también han heredado.

Otras prácticas tienen que ver con el trabajo artesano y culinario en diversos espacios, particularmente en el lugar de encuentro familiar por antonomasia: el hogar.

La pintura de esta artista se caracteriza por mostrar una pincelada muy definida y manejar una paleta de colores en la que predominan los tonos ocres y sepia. De este modo Silvia Rivera construye un relato complejo que da cuenta de lo propio de una zona que en los últimos años ha ido sufriendo grandes cambios paisajísticos, geográficos, económicos y, por ende, culturales.