El repunte turístico que urge consolidar
Positivas repercusiones -en cuanto a confianza, ánimo y fe en el porvenir a través de la industria del turismo- surgen del repunte turístico provincial, que se viene observando en el último tiempo en nuestra zona, particularmente este verano, -sobre todo en Puerto Varas y también en Puerto Montt-, y así corroborado por recientes estadísticas que señalan cifras en alza en este mes de enero con respecto a igual mes de año pasado en cuanto a la ocupación hotelera provincial, con 79%, y en Puerto Varas, sobre el 80%, y en Puerto Montt, con el 70%.
No cabe la menor duda que este prometedor auge en marcha desde el accionar de este gran pilar de nuestra economía sureña que es el turismo, es el fruto del gran esfuerzo, trabajo y tenacidad del empresariado que se dedica a este rubro desarrollista, donde está brindando un servicio de primerísima calidad y así internacionalmente reconocido. Y a lo cual se añade el determinante respaldo de las autoridades y la iniciativa privada, que se esmeran por ofrecer actividades y entretenimientos novedosos, que al mismo tiempo aportan recreación, cultura y salud. Y si a esto le agregamos el maravilloso ambiente que ofrece la privilegiadamente hermosa naturaleza circundante -acompañada de un clima atmosférico también mágico y sorprendente-, encontraremos la explicación del porqué de estas preferencias del visitante y los argumentos de este renacer del turismo regional.
Para consolidar este florecimiento turístico, es primordial, sin embargo, que aquellos proyectos que están postergados y que tanto tardan en materializarse, se agilicen y liberen de burocracias anestesiantes, para constituirse en vitales y decisivas palancas impulsoras de progreso. Sólo un caso: la iniciativa de puesta en valor de Monte Verde, el más trascendente descubrimiento arqueológico a nivel global con el asentamiento humano más antiguo de América aquí en Puerto Montt, para el cual se planea desde hace varios años un gran Museo y la recreación in situ de esos históricos poblamientos. Es de imaginarse, entonces, el inmenso acicate que -turística y culturalmente- significaría en el plano internacional como atracción digna de conocerse tanto por el mundo científico como por el viajero global.