Conaf denuncia al año 350 cortas ilegales de bosque nativo
TRIBUNALES. Infractores deben pagar multas y reforestar el área intervenida.
Al menos 1.300 fiscalizaciones al año, realiza la Dirección Regional de Conaf, para cerciorarse que los planes de manejo de los bosques se estén desarrollando conforme a lo autorizado.
Germán Pando, director regional subrogante de la entidad, precisó que de ese total, unos 300 controles están destinados a verificar esos planes de manejo.
En esa tarea, reconoció intervenciones sin disponer de una planificación autorizada por Conaf. "Al año denunciamos ante tribunales, del orden de 350 infracciones a la legislación forestal, de las cuales sobre 200 son cortas no autorizadas de bosque nativo, sin plan de manejo", reveló.
En la mayoría de esos casos, ese producto es comercializado como leña.
En ellos han aplicado importantes multas. Si el producto está en el lugar, corresponde dos veces su valor, además de su decomiso. Si los han cortado y retirado, son seis veces el valor comercial. "Además, solicitamos al tribunal la obligación del infractor a reforestar el área intervenida", dijo. Añadió que al año son aprobados alrededor de 700 planes de manejo de bosques, que incluyen la intervención y su reforestación "para que mantenga su calidad o la mejore"
Pando reconoció que aunque disponen de un equipo adecuado de fiscalización "nunca es suficiente . Siempre sería bueno tener más". Por ello pidió que la comunidad denuncie intervenciones ilegales, a través de la página web o de manera presencial en las oficinas de Conaf en la región.
MANEJO DEL BOSQUE
El director regional (s) de Conaf precisó que como el consumo de leña no es inocuo, ese servicio está mandatado para regular el origen de ese producto proveniente del manejo del bosque nativo y de los bosques en general (plantaciones forestales).
Y desde su perspectiva, observan efectos positivos en esta actividad, ya que "como la leña es un producto tan demandado, se ha transformado en una alternativa real para los propietarios de estos bosques para subsistir de ellos, con un adecuado plan de manejo aprobado y controlado por nosotros", enfatizó.
Aseguró que la misión de Conaf es controlar que ese trabajo sea bien ejecutado para "que ese bosque no sufra ningún tipo de degradación".
Conaf propone intervenir los árboles que presenten malas características de forma, con problemas sanitarios, enfermos o muertos en pie. También, pueden reducirse árboles jóvenes que no alcanzan el diámetro para obtener otro tipo de producto (madera aserrada), pero que al estar en bosques muy densos se utilizan para leña, con la finalidad de potenciar a los mejores y concentrar el crecimiento en algunos árboles.
El alerce es una especie protegida y está excluida de todo tipo de intervención. En la región existen unas 265.000 hectáreas, que son continuamente vigiladas por Conaf.