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Un 19 por ciento aumentaron las peleas entre reos al interior de la cárcel concesionada de Alto Bonito de Puerto Montt, entre el año 2013 y 2014, al comparar un mismo período de tiempo -entre enero y septiembre-, de acuerdo a las cifras entregadas por Gendarmería.
El Complejo Penitenciario, dentro de la región, sigue siendo una de las unidades penales que registra más casos de violencia.
El 2013, hubo 118 riñas, mientras que este año se registran 141. Respecto al número de heridos, existe un alza del 53 por ciento de reclusos lesionados con armas blancas -según las estadísticas- que en su mayoría han resultado graves, siendo trasladados al Hospital Base de la ciudad.
Lo que sí registra un descenso es el número de suicidios, ya que el año pasado hubo tres casos y este 2014 no hay ninguno, aunque sí intentos de quitarse la vida.
PELEAS POR TERRIToRIO
"Esto, debido a la llegada en el presente año de internos foráneos a la región, lo que involucra una especie de disputa por los territorios o dominio del mismo", dijo.
Respecto a cómo ha actuado el personal, el oficial sostiene que han sido muy profesionales y que los niveles de agresión no han producido lesiones de gravedad en los reos, ya que se ha podido salvar la integridad física de ellos.
En la actualidad -asegura Troncoso- existen alrededor de mil 100 reclusos en la cárcel concesionada, de los cuales, cerca del 35 por ciento son afuerinos; sin embargo, esta cifra discrepa con los datos de los propios funcionarios, pues aseguran que hay más de mil 200 reos y que existe hacinamiento.
El director regional de Gendarmería expuso que los reos que no son de la provincia han sido segregados en módulos distintos.
piden MAYOR DOTACIÓN
Y agregó que los funcionarios que trabajan directamente con la población penal también están expuestos al peligro. "Nos jugamos la vida por decirlo de alguna forma, debido a la gente que custodiamos y por las pocas condiciones laborales que tenemos", indicó.
Señala que respecto a las agresiones, donde han resultado graves los reclusos, son principalmente de afuera, de Santiago o el norte.
Hasta ahora, asegura que no han llegado más internos de afuera, pese a que se le siguen pagando a la concesionaria por la llegada de los 500 reos que se anunciaron en su momento.
"El Estado está perdiendo plata por eso, hay un tema político que se debe manejar y tratar de solucionar", adujo el dirigente. Los enfrentamientos se dan, en su mayoría, entre reclusos de alta y mediana peligrosidad. En ese último caso, Guzmán explica que se da por "el hacinamiento que existe, es decir, hay 150 ó 180 internos por módulo que fueron hechos para 90. No estamos como las cárceles antiguas, pero sí tenemos un grado de hacinamiento".