Duras críticas recibe la bandera Bicentenario
Disconformes. Senador Quinteros fustigó esta obra, mientras que concejal España dice que si se suma el Terminal de Buses queda listo un espacio para 'celebrar Halloween'.
Disconformidad existe entre distintas autoridades de la zona por la construcción e izamiento de la Bandera Bicentenario, que flamea desde el viernes en Puerto Montt.
Para el senador y ex alcalde de Puerto Montt, el PS Rabindrahath Quinteros, se trata de una inversión que no era necesaria realizar por cuanto los 446 millones de pesos que costó se pudieron utilizar en dar respuesta a otras necesidades de Puerto Montt y de la región.
Quinteros recordó que cuando era alcalde y de la administración del ex Presidente Sebastián Piñera le plantearon la idea y su valor, 'consideré que era absurdo teniendo en cuanta las necesidades' que existen en la zona.
Para Quinteros, el 'patriotismo no se mide por el tamaño de la bandera'.
Contó que primero la quisieron colocar en la Plaza donde están los colonos 'y yo me opuse porque habríamos tenido que sacar a los fundadores para colocar la bandera'.
Luego, le propusieron a Quinteros instalarla 'donde dicen que está el hito de comienzo de la Carretea Austral y yo me volví a oponer'.
En tanto, el concejal PS, Fernando España, recuerda que hace unos años pidió al Concejo Municipal ver si es que podían parar la obra, dado que le parece 'que rompe la tradición local, por cuanto se trata de una especie de sello político que quiso darle el ministerio de Obras Públicas en todo el país, sin medir que significaba un millón de dólares en cada una de las capitales regionales'.
Para España, ocurrió que 'sacaron una cosa antiestética como el árbol navideño por otra peor. Y si a eso le sumamos el Terminal de Buses, queda la decoración perfecta para celebrar Halloween. Falta la pura máscara para que esté listo el cuadro del terror'.
España coincide en que con esta inversión se podrían haber construido 10 a 12 sedes sociales con todas las comunidades, así como multicanchas en una cantidad similar, por lo que critica que estos valores no son aceptables para la realidad local.
El concejal lamenta que no fuera posible cancelar esta obra 'que es una de las grandes muestras de la centralización de nuestro país, ya que en un oficina de Santiago se define lo que puede o no tener una capital regional'.