Como ya es tradicional el 26 de septiembre pasado y bajo la coordinación de la Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante de la Armada de Chile (Directemar) junto al Ministerio del Medio Ambiente, se llevó a cabo la celebración del Día Internacional de Limpieza de Playas a nivel país. Iniciativa que como Capitanía de Puerto de Puerto Montt replicamos en la jurisdicción con la Secretaría Ministerial del Medioambiente, esto con el propósito de educar a la población en edad escolar sobre la importancia que tiene para la vida humana la protección del medio ambiente acuático, así en el área de Puerto Montt intervenimos tres playas. Aquel día alrededor de trescientos niños y niñas de once Colegios, pertenecientes al programa de Educación Ambiental que llevan a cabo en conjunto la Municipalidad de Puerto Montt y el Programa Puerto Montt es Nuestra Casa Cuidémosla, se sumaron a la iniciativa de recolección que contó con el apoyo de estudiantes de la Universidad de Los Lagos y de la Universidad Austral. Empresas privadas colaboraron con insumos (Aquachile, Transantartic, Fundación Chinquihue, Essal) y Camanchaca S.A., además realizamos limpieza terrestre y submarina de playas. Este fue el séptimo año de limpieza de Playas, en el que por primera vez buscamos con apoyo de buzos navales y de empresas privadas, desechos en el fondo marino. De igual manera la basura recolectada fue clasificada y diferenciada para su posterior reciclaje, trabajo que nos diferenció de las otras limpiezas de playas en Chile. Bolsas de plástico, botellas de vidrio y materiales de construcción fueron los elementos mayoritariamente recolectados en la jornada. Sin embargo detectamos elementos inusuales, como parte de carretillas, baños químicos, electrodomésticos, colchones, neumáticos, totalizando 4,9 toneladas de basura sólo en la Comuna de Puerto Montt. Recordemos que el Día Mundial de Limpieza de Playa fue instituido por The Ocean Conservancy, surge en el año 1991, iniciativa estadounidense bajo el nombre 'A Limpiar el Mundo'. El propósito de este día, es advertir sobre la creciente contaminación de los mares y los océanos por derrames de petróleos, vertidos de aguas residuales, contaminación por desechos sólidos especialmente plásticos y construcciones sin regulaciones dentro de la franja de protección de la costa. Por esto como Autoridad Marítima buscamos una interacción sustentable, apostando por la formación de una sociedad más consciente del impacto que tiene en su propia calidad de vida.

Una vez más, el semillero ciclístico de Puerto Montt se hace extraordinariamente notar en el plano nacional, al rayar a gran altura y resonancia, esta vez, en los Juegos Deportivos Escolares 2014 que se han estado dirimiendo en nuestra zona, así como en esta capital regional.

Su figura más destacada fue el chico Marcel Teneb, con sus flamantes medallas de oro en el gran fondo y prueba contrarreloj individual y por equipos, donde brilló el cuarteto de los juveniles Alexis Alarcón Nicolás Klenner, Hardy Scheihing y el mismo Marcel. Todos muchachos pedaleros de admirables condiciones técnicas y férrea vocación deportiva, voluntad y perseverancia. Virtudes que iluminan su dedicación a la disciplina del ciclismo, siguiendo la huella de otros grandes pedalistas puertomontinos como Ricardo Kiefer y Fernando Haefner, entre los antiguos, y Luis Westermeier, por aquellos de la década de los 80´, y Patricio Almonacid, símbolo ciclístico del presente y último campeón de la afamada Vuelta de Chile. Todos dignísimos ejemplos que emular tanto por su calidad deportiva como por sus atributos humanos de hidalguía, compañerismo y entrega a la causa deportiva.

Lo concreto es que los deportistas del ciclismo de Puerto Montt jamás destiñen y siempre están brindando más de alguna satisfacción y honor a la capital de la Región de Los Lagos, ya sea en nuestro país o en el extranjero.

¿No cree usted que los descritos son suficientes merecimientos, como para hacer realidad la gran aspiración de los ciclistas puertomontinos de llegar a disponer de un Velódromo, donde desplegar sus intensos entrenamientos, realizar competiciones, entre otras actividades propias de la disciplina? Lo que hasta ahora -por falta de aquel recinto- los pedaleros porteños se ven obligados a cumplir en las calles y carreteras, exponiendo su integridad física en medio de un movimiento vehicular cada vez más complicado, entre otros riesgos que surgen de la improvisación por falta de recursos y de un adecuado equipamiento y apoyo logístico. Ojalá ahora se materialicen las buenas intenciones que siempre ha habido ante los logros del ciclismo. Y el añorado Velódromo inicie, por fin, su avance hacia la meta.