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Estrella Blanca fue una máquina en juveniles y suma una nueva corona

amateur. Elenco de la población Mirasol venció por 3-0

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Estrella Blanca estaba sedienta de copas y ayer los juveniles, después de cuatro años, lograron el título del campeonato de la Asociación de Fútbol Amateur de Puerto Montt.

Demostrando el mismo tranco goleador en 11 fechas disputadas, los dirigidos de Sergio 'Cocoliche' Mansilla derrotaron en su reducto por 3-0 al colista Barrancas y aseguraron una nueva corona para la vitrina del club de la población Mirasol.

El equipo campeón completó un rendimiento casi perfecto a lo largo del torneo, aún cuando resta una fecha para el término del torneo.

Con 10 triunfos y sólo un empate, logró inalcanzables 31 puntos, lejanos del segundo en la tabla, Tricolor con 22 unidades, e incluso de quien tenía una remota posibilidad de superarlos, como fue el elenco de Manuel Montt (21), que asoma con dos partidos pendientes.

Estrella Blanca no tuvo obstáculos mayores al frente y sólo en el primer tiempo, sus vecinos de Barrancas lograron controlar las embestidas de las máximas figuras estrelleras de Eduardo Ulloa y Diego Rivera, los jugadores más peligrosos del ataque del elenco azul.

En la segundo fracción, a los 4 minutos, Giovanni Maldonado abrió la cuenta para los dueños de casa y 10 minutos más tarde en jugada colectiva, Diego Rivera consiguió el segundo tanto para el conjunto estrellero.

El mismo jugador debió salir lesionado luego de protagonizar un choque con el arquero de Barrancas.

Y faltando 12 minutos para el término del cotejo, aparece Brad Maldonado para conectar un disparo inalcanzable para el golero barranquino y así decretar la tercera diana, con la que conquistaron la corona juvenil.

En las huestes estrelleras bullía la alegría después de la obtención de una nueva corona e incluso, con la ayuda de un bombo, dieron rienda suelta a la celebración tras el triunfo.

El lesionado Diego Rivera y alumno de Instituto del Pacífico, señaló que 'con este equipo venimos jugando prácticamente desde la Escuela de Fútbol y no fue fácil llegar hasta esta instancia. Entrenábamos por la noches, pero aquí esta generación está entregando sus frutos y para mí y varios de mis compañeros celebramos por primera vez'.

El veloz delantero de los campeones, Eduardo Ulloa, obtuvo su primera estrella y aunque reconoció haber jugado con algunos problemas físicos, puso el corazón en la cancha, convirtiéndose en uno de los atacantes más incisivos del campeón.'Llegué a los 11 años y todos esperábamos como un sueño que esto se cumpliera. Estábamos buscándolo y lo conseguimos. Hicimos un tremendo campeonato. Por ello, entrenamos día y noche para lograrlo. Es un premio para el club y para nuestro esfuerzo', explicó.

Por último, el DT Sergio Mansilla elogió la entrega de sus adiestrados. 'Estos chicos son muy esforzados, demostrando los resultados que hemos conseguidos. Esta ha sido una lucha permanente para ellos. Nos preparamos durante meses para lograr el título y para mí es una alegría personal de dirigirlos', explicó.