Alemania expulsa al representante de la CIA en Berlín
Vigilancia. La decisión ocurre tras nuevas denuncias de espionaje estadounidense.
Alemania anunció ayer que expulsará al jefe de la inteligencia estadounidense en Berlín, una dura medida contra un aliado ante la controversia sobre el espionaje norteamericano en el país europeo.
El detonante inmediato de la expulsión fue el surgimiento de dos nuevas denuncias de espionaje estadounidense y se da en el contexto de un profundo descontento alemán por lo que considera una falta de respeto y una injerencia indebida en los asuntos de un país donde se venera la privacidad.
Funcionarios estadounidenses calificaron la medida alemana como extraordinaria. Un ex funcionario estadounidense dijo que no recuerda un caso en la historia reciente en que un país haya expulsado al jefe de la inteligencia estadounidense. El funcionario pidió no ser identificado por no tener autorización para hablar públicamente del tema.
La controversia comenzó el año pasado con denuncias de que la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU. (NSA) estaba escuchando las llamadas por el teléfono celular de la canciller Angela Merkel, y que estaba vigilando los mensajes de Internet transmitidos en Alemania. Estas denuncias llevaron a una investigación penal y a la creación de una comisión parlamentaria.
'Hemos solicitado al representante de los servicios de inteligencia de la embajada de EE.UU. que salga del país', dijo el portavoz del Gobierno, Steffen Seibert.
Tras el anuncio, la Casa Blanca reaccionó diciendo que es 'esencial' que EE.UU. y Alemania continúen su cooperación en todo tipo de áreas.