Alta preocupación por suelos degradados
Ya en el año 2008 , el Ministerio de Agricultura había determinado un millonario recorte de fondos a programas relevantes acerca de suelos degradados (SIRDS) en nuestra zona sur, lo que dejaba a nuestros agricultores especialmente productores ganaderos y lecheros muy complicados para cancelar los montos relativos a la fertilización de sus suelos.
Hoy se ha anunciado rebaja de más de 1 mil 800 millones de pesos, lo que afectará significativamente el presupuesto de este programa del SAG destinado a mejorar la productividad de los suelos, con ello se afectará al sector ganadero que ha debido aumentar su descarga animal, dado el escaso recurso pratense existente, lo que se ha traducido en una baja considerable de los precios por esta mayor oferta en el mercado.
En el ámbito lechero se ha tenido que recurrir a los forrajes conservados y suplementación, vía concentrados lo que con el aumento del valor del dólar ha incrementado los costos de producción, lo que ha traído como consecuencia una disminución de la producción lechera del orden de un 7% a marzo del presente año en comparación al año anterior.
A nuestro juicio no deberá ser necesario desarmar programas ya establecidos tan relevantes como este para enfrentar emergencias, aunque existe el compromiso de devolver estos montos, que si así ocurriera llegarían extemporáneamente a nuestro sector.
Este recorte de más de un 30% del presupuesto, significará que de los 800 productores que postularon a financiamiento por esta vía, sólo un 28% obtendrán el financiamiento requerido , lo que se traducirá en una menor producción a la ya existente con el consiguiente deterioro financiero de nuestros asociados.
Hacemos un llamado a las autoridades a revertir esta situación ya que uno de los polos de desarrollo definidos en la estrategia regional es el sector agrícola, fuente principal de actividades económicas vitales tanto a nivel comunal como provincial. De momento quedaremos atentos para ver como gremio, de que modo enfrentaremos este recorte anunciado, de antemano indicando nuestro rechazo al mismo, pues consideramos que esto va retrasar nuestras actividades y desarrollo integral del sector, sumados a los vaivenes de un mercado internacional de precios muchas veces desfavorable, al que siempre está sometido nuestro sector y que determina la rentabilidad y subsistencia del sector.