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Violaciones son el punto de discordia en debate por aborto terapéutico

Puntos de vista. Conocida socióloga de Puerto Montt defiende la vida y se refiere a su fuerte experiencia. 'Yo soy una mujer que fue violada a los 16 años y concebí a la mayor alegría que he tenido en mi vida', señaló. Colegio Médico se mostró de acuerdo con despenalizar el aborto y los evangélicos dicen estar con el 'plan para salvaguardar la vida'.

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La despenalización del aborto con fines terapéuticos en Chile, es un tema que se discute desde hace varios años, y Puerto Montt no ha quedado ajeno, especialmente en uno de los tres puntos que son argumentados por el Gobierno, y que se refiere a la violación.

Bernarda Gallardo es una conocida socióloga de Puerto Montt. Es integrante de la Agrupación Padres Adoptivos por la Vida, que busca dar una identidad y posteriormente sepultura las guaguas víctimas de infanticidio, lo que incluso motivó la realización de una producción cinematográfica.

La profesional está por el concepto de vida, pero bajo su fuerte experiencia personal. 'Yo soy una mujer, que fue violada a los 16 años, y que concebí a la mayor alegría que he tenido nunca en mi vida; concebí a mi hija mayor, parí a mi hija mayor, y dediqué mi vida a mi hija mayor. No me habría servido la píldora del día después ni tampoco el aborto, porque me demoré dos terapias y cuatro años en asumir que ella fue concebida por una violación. De esa hija nació mi primer nieto, a quien amo profundamente. Son tres generaciones que estamos vivas por el amor: yo, mi hija mayor y mi nieto', manifestó.

Para Bernarda, la sociedad debe dar la opción a las mujeres para que pudiesen decidir. 'Hablando no como socióloga o especialista en políticas públicas, sino que como mujer, quiero decir dos cosas: primero que lo que nos hace humanos y católicos en mi caso, es nuestra capacidad de discernimiento, de distinguir el bien del mal, nuestra capacidad de decidir cuál camino tomar. En consecuencia, lo que le pediría a mi sociedad y país es que las mujeres pudieran optar, para lo cual el Estado debe darle todas las opciones posibles, y que se gaste la misma plata, los mismos recursos y la misma publicidad en fomentar el aborto. Que ello sea gastado en fomentar la adopción, en proteger a las mujeres que deciden llevar a término cualquiera de estos embarazos de riesgo y decidan ya sea entregar en adopción a la guagua o criarla, cosa que no se hizo con la píldora del día después. Si no tengo esa capacidad de elección, estoy ante un Estado totalitario que niega mi libertad de decisión. En mis caso, en mi historia de vida, yo soy mamá adoptiva de dos hijos preciosos engendrados en el vientre generoso de una mamá que los tuvo, los parió y los entregó. De una mamá que dio la vida dos veces, al parir y entregarlos'.

La socióloga insiste que las políticas públicas consisten en tratar de buscar soluciones a los problemas sociales, y se refiere a la píldora del día después, 'porque tras la bandera de la legalización del aborto ante casos de violación, ni siquiera se plantea como legítima la pregunta por el qué hacer y cómo para proteger el derecho a la vida del bebé en gestación y su derecho a nacer, a crecer y a desarrollarse en una familia que lo ame, proteja y cuide. Que el aborto se aplique sin restricción de edad gestacional del bebé. Nos olvidamos de los derechos a la vida, a la identidad y a vivir en familia del bebé, ¿y también del derecho a la justicia que exige la mujer violada y a las medidas de reparación que el Estado y la sociedad deben brindarle?, porque fue esa sociedad y ese Estado quienes no fueron capaces de prevenir la violación que ella sufrió. En fin, sabemos siquiera cuál es el porcentaje de mujeres, y de qué edades, que acuden a los consultorios a pedir la píldora del día después por haber sido violadas y cómo fue acreditada y sancionada esa violación, porque no olvidemos que en nuestro país una violación es un delito sancionado penalmente'.

El doctor Enrique Paris, presidente nacional del Colegio Médico, señaló que está la objeción de conciencia y al interrumpir el embarazo se atenta contra la religión o creencia, 'por lo tanto no se puede obligar. La libertad es para todos, es la mamá la que puede decidir seguir o no con el embarazo, eso se tiene que respetar', apuntó. El proyecto sobre aborto terapéutico que propicia el ejecutivo es en caso de aborto por violación, por riesgo de la vida de la madre y cuando el niño tiene baja posibilidad de viabilidad. 'En la violación ingresa otro concepto y se refiere al comienzo de la vida, en el vientre materno, y aquí se debe insistir en la prevención, en el uso de la píldora del día después, el uso correcto de los métodos anticonceptivos. Se requiere mucha educación en el colegio para evitar los embarazos no deseados, y ello permite la disminución en forma enorme de la interrupción del embarazo', explicó el doctor Enrique Paris.

Benito Baranda, ex director del Hogar de Cristo, presidente de la Fundación América Solidaria, hizo un llamado en Puerto Montt a discutir sobre esta materia.

Para Baranda, las sociedades se tienen que abrir a la discusión de los temas valóricos. Pese a estar en desacuerdo con el aborto, dijo que es un tema que ronda en la sociedad 'y a veces no lo discutimos. Hay personas que podemos estar en contra del aborto y otros a favor, pero si ello no se discute públicamente cómo vamos a llegar a un acuerdo ciudadano, para poder convivir con algo que ha sido acordado y no con algo que se ejecuta en forma ilegal. Esta discusión si no se da ahora, la sociedad terminará siendo hipócrita y todos los temas valóricos en una sociedad democrática se tienen que discutir; claro, algunos no lo van a compartir. Esta discusión que lleva tanto tiempo latente en Chile se pone al inicio del Gobierno, y ello es positivo, y salga A, B o C la discusión final, esto es muy importante', acotó.

Quien se disculpó de opinar sobre la iniciativa gubernamental, fue Anita Urrutia, de la organización de derechos reproductivos de las mujeres. El 9 de agosto de 2007, Anita Urrutia defendía su postura en un foro organizado por la Universidad Austral de Chile (Uach). 'Afortunadamente se está logrando enfocar el tema de la calidad humanizada de la atención en salud en los profesionales y en las escuelas formadoras, como es el caso de la Uach, donde egresan nuevos profesionales con el concepto de género, de derecho, de calidad y una mirada diferente a lo que son los derechos sexuales y reproductivos de las personas; con respeto y la capacidad de ponerse en el lugar del otro u otra, pues muchas se han informado y han tomado las precauciones, pero el método ha fallado', comentó hace 7 años.