Al igual que el viaje de ida, por vía aérea, retornó el plantel de Deportes Puerto Montt para dejar atrás el triunfo ante la filial de Colo Colo y concentrarse en el esperado partido del segundo semestre, y el año, ante Iberia.

En la mañana de ayer, todo era relajo y dedicación en el Estadio Chinquihue. Por un lado, los jugadores que no estuvieron en la nómina y los que ingresaron en el segundo tiempo se pusieron a disposición del preparador físico Patricio Ulloa; en otro costado, estaban los arqueros bajo el mando de Robert Prieto, mientras los titulares realizaban trabajos regenerativos con los kinesiólogos, para que nada quede al azar en esta semana.

Confianza y optimismo reinan en el plantel, que había buscado durante todo el torneo esta opción, la que puede concretarse en realidad si vencen a los angelinos.

"Estamos muy enfocados en este partido para obtener los tres puntos y lograr el ascenso, objetivo que todos queremos", puntualizó el atacante Juan Pablo Carrasco.

Sobre el aspecto sicológico, mental y de ansiedad que se vivirá en la semana, el ex Deportes Valdivia comentó que "creo que la ansiedad y los nervios siempre van a estar, es un tema que debemos manejar; pero se contrarresta con la motivación de encontrarnos con un estadio lleno".

Pese a lo corto de la semana, tras el partido en la capital, el equipo se mantiene tranquilo de cara al próximo desafío, según manifestó el volante Braulio Baeza.

"Lo hemos asimilado de muy buena manera, concentrados, tranquilos y con la confianza de consagrar esta campaña con el título. Estamos conscientes de que no se hizo un buen partido en Santiago, pero este partido es especial, es una final y se juega de distinta forma, sencillamente a ganarla", enfatizó Baeza.

"De local tenemos todo a favor: la gente, el clima y la cancha, que conocemos de memoria. Está todo a favor para ganarlo. Sabemos que de visita no se jugó bien, pero en estas instancias lo más importante es el resultado", agregó.

En cuanto al fervor que se vive en la ciudad, el mediocampista afirmó que "también estamos con euforia por el momento que se está viviendo, tenemos que manejarlo de buena forma, porque sino nos puede jugar en contra. Hay mucha ansiedad, uno quiere que comience rápido el partido, pero sabemos que la gente nos va a apoyar el fin de semana".

En horas de la tarde, la dirigencia porteña confirmó el compromiso para las 20 horas del sábado en el Estadio Chinquihue, luego de las gestiones del presidente del club Juan Jorquera en las oficinas de la Asociación Nacional del Fútbol Profesional (Anfp).

En un minuto se especuló, por motivos de seguridad, que se jugaría a las 18 horas, pero se disputará a la hora que los albiverdes han jugado la campaña en condición de local en esta parte del torneo. Además, se conoció que el juez Rafael Troncoso, de la Primera B, dirigirá el encuentro.

Anoche la dirigencia asistía al Tribunal de Disciplina del ente rector, para buscar que el lateral Jorge Inostroza juegue en esta fecha y cumpla contra San Antonio la sanción, tras su expulsión el martes.