A sólo un día del cambio de mando, la opinión pública conoce sólo los nombres de los ministros, subsecretarios e intendentes.
Podría suponerse que la errática nominación de subsecretarios ha obligado al equipo político a revisar con extremo cuidado los antecedentes de los nombres de las nuevas autoridades.
Asólo un día del cambio de mando que llevará de vuelta a Michelle Bachelet al Palacio de La Moneda, la opinión pública conoce hasta ahora únicamente los nombres de los ministros, subsecretarios e intendentes que la acompañarán en la tarea de dirigir los destinos de la nación. Es poco, si se considera que el Poder Ejecutivo contiene una multiplicidad de cargos necesarios para la administración de la República.
En el plano regional, a la fecha se sabe sólo que el abogado puertomontino Nofal Abud será quien asuma como intendente regional, y se está a la espera del nombramiento de los gobernadores de Osorno, Llanquihue, Chiloé y Palena, así como los secretarios regionales ministeriales (seremis) y los directores de servicio, en lo que es la primera línea de la Región para avanzar hacia la consecución del programa de gobierno que se impuso la candidata ganadora de las elecciones presidenciales.
Aunque no se conocen con certeza las causas de ese retraso, podría suponerse que la errática nominación de subsecretarios, algunos de los cuales se bajaron de la futura administración debido a problemas pendientes, ha obligado al equipo político a revisar con extremo cuidado los antecedentes de los nombres de las posibles nuevas autoridades.
El exigente filtro es un elemento algo nuevo en la política chilena que comenzó a imponerse luego de determinadas experiencias, algunas incluso traumáticas, y que nace del progresivo control ciudadano que se realiza a través de los medios de comunicación tradicionales y las redes sociales.
No obstante, esto no debiese servir como justificación para un retraso que ojalá impacte lo menos posible en las políticas públicas que se impulsarán a contar del 11 de marzo y que se necesitan para la marcha normal del país. Algo que, en todo caso no es nuevo, pues ocurrió también cuando asumió el Presidente saliente, Sebastián Piñera, lo que generó duras críticas de los representantes de la antigua Concertación. Así las cosas, se espera que no repitan una fórmula que genera incertidumbre en la ciudadanía.