La designación de Nofal Abud debe contar con el apoyo de todos, porque el éxito de su gestión, es el éxito de la región.
Un puertomontino de 44 años, hijo de padres vinculados al servicio público y dueño de una destacada carrera como abogado, es el nuevo intendente de la Región de Los Lagos. Nofal Abud Maeztu será el encargado de liderar el segundo gobierno de Bachelet en esta pujante región.
De este modo, la Presidenta electa puso fin al misterio respecto de estas designaciones, y escogió, en líneas generales, a hombres y mujeres que conocen las zonas donde ejercerán; y salvo excepciones, es gente que viene a renovar los liderazgos políticos.
Para todos ellos, el desafío es mayor, porque las expectativas son altas y la ciudadanía hoy es mucho menos paciente que antes, está empoderada en sus demandas y quiere acciones y no promesas.
En el caso de nuestra región, Abud tendrá que dar continuidad a varias obras que puso en marcha el actual Gobierno, como por ejemplo, la implementación del nuevo Hospital de Puerto Montt; así como seguir avanzando con el Plan Chiloé y dar los pasos necesarios para la construcción del puente sobre el canal de Chacao, por nombrar un par de obras emblemáticas.
Pero más allá de estos grandes hitos para la región y otra serie de acciones que tendrá que liderar para mantener las positivas cifras de desempleo o estimular el crecimiento; lo cierto es que también tendrá que tener una mirada estratégica respecto del desarrollo de zonas como Puerto Montt y Puerto Varas, que según las proyecciones censales y del Ministerio de Vivienda, se transformarán en una conurbación que de aquí al 2018 albergará a alrededor de 500 mil habitantes; crecimiento que no puede quedar sólo en manos de las autoridades comunales, sino que tiene que tener una mirada de Estado, y en aquella tarea la voz de Abud y del propio subsecretario Galilea, serán muy importantes.
Los desafíos son innumerables, sin duda. De manera que es tiempo de respaldar el nombramiento de este hijo de esta tierra, y apoyarlo desde las respectivas competencias de cada uno de los actores de la sociedad civil, porque su éxito, es el éxito de toda la región.