Cada 11 de julio, los periodistas conmemoramos también nuestro Día especial, que nos permite reflexionar sobre la importancia de esta profesión en la vida de los pueblos, libre, democrática, debidamente informada y apoyada en sus afanes de progreso y superación; así como en nuestro compromiso de cumplimiento con una información veraz, oportuna y sólidamente respaldada por los propios protagonistas de los sucesos. Para lo cual debemos estar profesionalmente capacitados y actualizados en los conocimientos del rodaje del mundo, comenzando por el propio entorno.

En esta jornada, se recuerda la promulgación de la Ley que creó el Colegio de Periodistas de Chile -la N°12.045-, el 11 de julio de 1956, que funciona mediante consejos regionales a través de todo el país, siendo el local el de Los Lagos, cuyo actual presidente es el periodista Sergio Velásquez Haro. Este le ha inyectado un impulso especial, que se distingue por la fuerza de una gestión neta y absolutamente gremialista, sólo preocupada del bienestar y capacitación de los asociados. Marco en el cual ha establecido una dinámica participación, especialmente inspirada en benéficos temas sociales, en comisiones vinculadas a servicios gubernamentales como Bienes Nacionales, Vivienda y Urbanismo, y otros como el Instituto de Previsión Social y las juntas vecinales. Ya no más bastiones periodísticos aislados, sino que integrados a la comunidad, para aportar nutriéndose de esa experiencia en mutua colaboración.

En el Día del Periodista, los comunicadores hemos repasado la trayectoria y quehacer de nuestra profesión en Chile. Pero, cada uno en su fuero interno ha reconocido la trascendencia de su especial vocación y delicada misión de informador testigo del devenir de nuestro país, responsable de una sociedad enterada, custodio de las más nobles virtudes morales ciudadanas, constructivo impulsor del desarrollo integral de las comunidades. Todo lo cual comienza desde su fidelidad a lo que es su razón de ser: la noticia y su principal protagonista que es el ser humano, por cuyo bien existe el Periodismo.

Mente sana en cuerpo sano" dice la humanidad desde hace dos mil años orando a los dioses por el equilibrio que nos permita mantener nuestra alma saludable. Este año, la oficina de Medio Ambiente de ONU utilizó un concepto similar para publicar la sexta edición del reporte Perspectivas del Medio Ambiente Mundial (GEO-6): Planeta sano, gente sana. Un llamado a dejar de mirarnos como un lunar en este gran cuerpo de vida que es el planeta y considerar el todo. Es que la salud humana estará cada vez más amenazada si no tomamos medidas urgentes para frenar y reparar los graves daños causados al medio ambiente, advirtió la ONU en este informe elaborado durante los últimos cinco años por un equipo de 250 científicos. ¿Cómo nos afectaría? La resistencia antimicrobiana podría convertirse en una de las principales causas de muerte en 2050 debido a la contaminación del agua. Si aún no estamos convencidos que la salud del planeta nos afecta, hoy abrir la mirada y cambiar de paradigma es urgente. Nuestros sistemas de alimentación, nutrición, salud, aire limpio, clima y agua pura dependen de la biodiversidad y de la salud de los ecosistemas, que conforman una red interdependiente de vida animal, vegetal, fúngica y bacteriana. Lo vemos aquí, sin polinizadores muchos de los alimentos que conocemos y amamos desaparecerán. La buena noticia es que está en nuestras manos. El informe es categórico al afirmar que hoy la humanidad tiene a su disposición la ciencia, la tecnología y las finanzas necesarias para evitar mayores riesgos. Y en esta gran tarea los parques nacionales tienen un papel muy importante que cumplir, pues son la máxima y más sólida garantía de resguardo de ecosistemas a largo plazo y a gran escala, claves para frenar la crisis de extinción de especies, mitigar el cambio climático y mantener los procesos naturales que dan forma a la diversidad de vida del planeta. Los parques nacionales son, también, espacios de transformación que nos conectan con lo salvaje y lo bello, impulsándonos a fortalecer el equilibrio entre ciudadanía y naturaleza. Los parques nos invitan a disfrutarlos, respetarlos, cuidarlos y quererlos.

Rodrigo Jordán.