Cuando se pensaba que los habitantes de Pelluco estarían complacidos y felices con la flamante y moderna doble vía turística que los une a Puerto Montt, irrumpe, con desenfreno y molestias, una problemática no menor: el cierre de la mencionada ruta, cuando se desarrollan competiciones deportivas de connotación, ya sean del tipo de maratones o corridas de ciclistas u otros.
Esta situación tiene muy afligidos y disconformes a los pobladores del conocido balneario, especialmente a sus dirigentes vecinales, que han planteado la dificultad a El Llanquihue con mucha vehemencia y deseos de que se llegue a una pronta solución. Porque hasta ahora -según anotan- nadie los ha tomado en cuenta, siendo ellos los más perjudicados con la carretera clausurada.
Reiteran que -por el tema de los eventos deportivos- , cada vez más periódicamente realizados, les están impidiendo desplazarse hasta Puerto Montt durante varias horas, de preferencia los fines de semana. Período en el que, ya sea por trabajo o cualquier emergencia, permanecen prácticamente aislados en Pelluco, sin el servicio de la locomoción colectiva. No hay ninguna otra conectividad por la parte alta en condiciones de ser transitada, salvo una huella, que se halla muy deteriorada, y donde se debe caminar por espacio de al menos una media hora para alcanzar al sector de Lintz.
Los directivos y la comunidad pellucana anuncian próximas reuniones, para ensamblar un frente organizado que logre ante las autoridades revertir esta problemática y si así no fuera, recurrir al amparo de un recurso de protección, como enfatizaron.
Hay que escuchar a los habitantes de Pelluco y atender sus clamores. No se les puede aislar sin su consentimiento, aunque sea por un tiempo limitado. Conviene reunirse con ellos, escuchar sus inquietudes sobre el tema, y adoptar las resoluciones más convenientes y positivas. Como podría serlo también habilitar -con óptimo acondicionamiento- una ruta alternativa de conexión entre el balneario y la ciudad capital regional por la parte alta.