Erwin Schnaidt Ávila
A una multa de $48 mil y hasta los $483 millones (una a diez mil UTM), se expone la empresa Ventisqueros, por el escape de salmones desde su centro de cultivo Tubildad, en la comuna de Quemchi, ocurrido el pasado jueves 27 de diciembre.
El hecho fue reportado ante la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) por el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), ya que se trata de instalaciones que operan con una Resolución de Calificación Ambiental (RCA), la que también podría verse cuestionada y llegar incluso a su revocación, lo que le impediría seguir operando en ese centro de engorda.
Pero eso no es todo, porque el lunes de esta semana, se produjo un segundo escape que afecta a la misma compañía. Esta vez se trató de especímenes que habían sido recapturados y trasladados a un centro de acopio de la compañía, localizado en el sector Chincui.
En este caso, al no existir una RCA para esas dependencias, el Sernapesca cursó la denuncia a través de la justicia civil de Puerto Montt, que podría llegar a aplicar multas que oscilan entre los $2 millones 417 mil y los 145 millones de pesos (de 50 a 3 mil UTM).
Los antecedentes fueron aportados por Eduardo Aguilera, director regional de ese servicio, quien reconoció su extrañeza por la demora en la entrega de información por parte de Ventisqueros.
Esta situación ha derivado en que todavía no se conozca la cifra oficial de salmones escapados desde el centro chilote, ni de los que lograron salir del punto de acopio ubicado en la costa de Puerto Montt.
Aún así, Aguilera estima que esos números serán conocidos una vez que la compañía concluya la cosecha (8 de enero), lo que permitirá "evaluar las diferencias de inventario que pudiera tener, para determinar la cantidad de peces escapados".
Sin embargo, se conoce que mantenían 129 mil 694 ejemplares en el centro de Tubildad, con un peso promedio de 4,3 kilos, los que estaban distribuidos en cuatro de las 20 jaulas que componen esa infraestructura.
Sin confirmar
A pesar que Ventisqueros no ha reconocido esa situación, el director regional de Sernapesca recordó que el 28 de diciembre, la salmonicultora activó el plan de contingencia por el escape de ejemplares de coho desde el centro Tubildad; mientras que el pasado lunes 31 de diciembre, hizo lo mismo respecto del sitio de acopio localizado junto a su planta de procesamiento.
"Tenemos la evidencia importante respecto a que se detectó la presencia de peces de la misma especie y características fuera de las jaulas, tanto en Tubildad como en Chincui. Al no haber otros centros en las cercanías con peces de esas mismas características, no resta más que concluir que se trata de peces de esas instalaciones", comentó Aguilera.
Venta ilegal
En cuanto a la captura y posterior venta ilegal de algunos de esos peces, el director regional del Sernapesca manifestó que su consumo no debería ocasionar problemas a la salud.
"Los peces estaban pronto a ser cosechados, por lo que desde el punto de vista de la inocuidad alimentaria, están en condiciones de ser exportados a los mercados de destino, que son bastante exigentes", comentó Aguilera.
Sobre un eventual daño ambiental, dijo que "es un tema que debe ser evaluado".