La carta clave de Errázuriz

E-mail Compartir

En la carta enviada por Errázuriz a Giuseppe Pinto, le revela que "la presentación de las denuncias ante el promotor normalmente calma la agresividad de los acusantes. Por respeto al padre Karadima no le pedí al promotor que lo interrogara; sólo le pedí a monseñor Andrés Arteaga su parecer. Él consideró que todo era absolutamente inverosímil. Como se trataba de hechos prescritos cerré la investigación. Así quise protegerlos, consciente de que mi manera de proceder, si los acusadores llevasen algún día el caso a la prensa, se volcaría en contra de mí".