Obras urbanas y mirada al futuro
Tomás Cortese. Director Ejecutivo Fundación PLADES.
Estamos arribando a los últimos meses del año y es inevitable reflexionar un poco. En este espacio hemos hablado diversas voces sobre un conjunto de iniciativas que tocan sostenibilidad, barrios, creatividad, innovación social, desarrollo rural, educación y alianzas de todo tipo. Sin embargo, el rol de PLADES estaría incompleto sin obras urbanas, que son parte de la génesis y dan el nombre a nuestra Fundación. PLADES nace de un Plan de Desarrollo Urbano Sustentable, el cual descansa en un mandato ciudadano originado hace 5 años, que prioriza una serie de obras definidas y votadas por la misma comunidad, con una mirada de largo plazo que contempla hasta el 2030.
La tramitación y ejecución de la mayoría de estas obras corresponde a la Municipalidad y el rol de PLADES es ser un complemento, aportando una mirada estratégica y articulando capacidades públicas con iniciativas privadas y/o de la sociedad civil, que responden a esa voluntad, de hacer crecer la comuna con la integración y la sostenibilidad como un norte. Gracias al liderazgo del municipio y el trabajo de funcionarios y profesionales comprometidos, hoy hay un portafolio viable de proyectos de gran consistencia, diversidad y alto impacto social, todos consecuentes con la mirada del Plan. Luego de más de una década de crecer a escala pequeña en términos de infraestructura , hoy vemos que se abre una etapa de obras de mayor calado.
Siendo Frutillar una comuna pequeña, desigual y con altos índices de pobreza, la ciudad y los espacios públicos están destinados a ser los grandes atajos hacia la equidad y la calidad de vida, así como motores del desarrollo económico. Hace unas cuantas columnas decíamos que la sostenibilidad urbana se da por un balance virtuoso entre edificios (infraestructura) y personas (ciudadanos). La inversión pública en parques, costanera, barrios comerciales y proyectos viales estructurantes no son un lujo, sino el camino más seguro para impulsar una ciudad más justa y próspera para todos. Mucho más allá de Frutillar, es importante recalcar el valor de ejecutar obras pensadas en el marco de una mirada de largo plazo y con los ciudadanos siempre al centro. Esperamos que la experiencia de Frutillar resulte como la imaginamos y trascienda mucho más allá de sus límites comunales.
Eduardo Carmona Jiménez. Director Ejecutivo
ONG Canales.
Empresas en la
educación del mañana
Por casi un mes tuve la oportunidad de cursar el Programa de Liderazgo para Visitantes Internacionales (IVLP) del Departamento de Estado de Estados Unidos, donde pude conocer a distintas personas de las áreas de gobierno, política, medios de comunicación, educación y negocios, entre otras, bajo las temáticas centrales de ética, probidad y transparencia. En esa instancia, la gran conclusión obtenida es que la ética, probidad y transparencia es la puerta de entrada para que la comunidad pueda volver a confiar en las instituciones; en los actores políticos, en las ONGs, en las empresas y en el mundo en general. En ese contexto las organizaciones sociales cumplen un rol fundamental, ya que permiten articular a los sectores público y privado en torno a un bien común. ONG Canales, que nace como un consejo empresarial para la educación busca fortalecer la educación técnico profesional de la zona sur austral de nuestro país vinculando al sector productivo en diferencias instancias de trabajo en conjunto. Canalizando, de esta forma, el interés del empresario comprometido con la formación de los jóvenes técnicos y el desarrollo de la comunidad. A través de las distintas instancias de trabajo que genera ONG Canales entre los establecimientos técnicos profesionales y los sectores productivos, les transmitimos a los empresarios que lo importante no sólo es el desarrollo económico y la productividad, sino también servir y responder a la comunidad. En este plan de trabajo, el viernes 12 de octubre realizamos un almuerzo con empresas y autoridades locales para dar cuenta de nuestros desafíos como ONG Canales. En la reunión, hicimos una invitación a cambiar la mirada con relación a la educación técnica, creemos que es un error pensar que es exclusivamente para los más pobres y que la empresa debe asumir un rol activo para ser efectivamente protagonista del desarrollo local. Si como país apuntamos al desarrollo recordemos que, en países como Estados Unidos, Alemania y Suiza, los sectores productivos, las empresas y empresarios, participan activamente en todo el proceso de formación técnico profesional de los jóvenes, poniendo a disposición más allá de los recursos, habilidades, talentos y conocimientos especializado al servicio de los establecimientos. Es precisamente esa la invitación de ONG Canales a las empresas locales.